Esposa Pecadora romance Capítulo 957

Jeremy besó la cabeza de Madeline, como si estuviera desesperado por tenerla cerca. Unos segundos después, la apartó fríamente. "Continúa con tus asuntos".

Esta actitud contradictoria le pareció extraña a Madeline.

Entonces, Jeremy se dirigió a un lado para fumar. La marca del cigarrillo que fumaba era la misma que la de Lana.

Madeline sabía que mentía si decía que esto no le molestaba, pero sabía que Jeremy no escucharía nada de lo que ella dijera en ese momento.

El kit de aromaterapia estaba hecho, pero aún tenía que reposar toda la noche.

A juzgar por la reacción de Jeremy, parecía que todavía quería llevar a Madeline a su casa con Lana. Ella se negó. "Mi hijo solo tiene un mes y necesita mi leche materna para crecer sano. Tengo que ir al hospital ahora".

Madeline entró en el ascensor con actitud firme. Cuando vio que Jeremy la seguía, quiso entrar en otro ascensor, pero el hombre la hizo retroceder.

Se resistió, pero no lo consiguió, él la retuvo con fuerza, contra la pared del ascensor.

Jeremy la miró fijamente, con sus ojos encantadores. "Eveline, a los hombres les gustan las mujeres que los escuchan. No intentes provocarme de nuevo".

"¡Si no eres mi esposo, Jeremy Whitman, entonces no necesito agradarte! ¡Piérdete!". Madeline comenzó a sentir que la ira crecía en su pecho.

Jeremy puso su mano en el pecho de Madeline de repente, y esta acción confundió a Madeline.

Sin embargo, sus ojos parecían coquetos, mientras su tono era travieso. "¿Estás segura de que todavía quieres luchar? ¿Estás segura de que no te importará que alguien entre ahora en el ascensor y nos vea en esta posición?".

Madeline estaba indefensa, ante la amenaza del hombre, así que le advirtió: "¡Aleja tus manos de mí!".

Sin embargo, a Jeremy no le importó. "Si no me escuchas, continuaré".

“...”

Sin embargo, era mejor que la gente pensara que se estaban besando en el ascensor, a que vieran la mano de él en su pecho.

Cuando Madeline salió del ascensor, sintió que los empleados la miraban a ella y a Jeremy con miradas cómplices. Todos sonreían amorosamente.

Ella supuso que lo que acababa de ocurrir se extendería por toda la empresa, pero no sabía si eso sería bueno o malo.

Se dirigió rápidamente a la puerta para poder visitar a su hijo en el hospital.

Cuando salió por la puerta, se encontró con alguien delante de ella. "¡Eveline Montgomery!".

Naomi miró a Madeline con malicia. Rápidamente, levantó el café caliente que tenía en la mano para salpicarlo sobre ella.

Cuando Madeline estaba a punto de esquivarlo, Jeremy corrió hacia delante y le agarró de la muñeca para llevarla detrás de él.