Esposa Pecadora romance Capítulo 967

La expresión ganadora en el rostro de Lana se desvaneció. "Eveline, ¿es este tu hijo?".

Madeline tiró rápidamente de Jackson detrás de ella, ya que tenía miedo de que Lana tomará medidas contra él. "Jack, vuelve y quédate con Lily. No salgas".

Jackson frunció el ceño. "Pero mamá...".

"Escúchame. Entra ahora".

"De acuerdo". Jackson asintió y miró a Jeremy que tenía los ojos puestos en él. "Papito, ¿cuándo vas a regresar a casa? Lily y yo te echamos de menos", añadió el pequeño, antes de mirar a Jeremy con desgana e irse a la otra habitación.

Jeremy miró, sin comprender al pequeño que se fue. De repente, se sintió desanimado sin razón alguna.

Sin embargo, su mirada volvió a dirigirse a Madeline casi al instante.

Era evidente que había llorado antes. Sin embargo, como había nacido hermosa, seguía siendo impresionante, aunque no estuviera en el mejor estado.

Lana no se dio cuenta de que Jeremy miraba fijamente a Madeline, mientras se arreglaba el pelo con agitación.

"Eveline, tu hijo es igual que tú. A los dos les encanta buscar problemas y pedir la muerte".

Su declaración estaba llena de indirectas y advertencias.

"Todos los que se atrevieron a ir contra mí han desaparecido de la faz de la tierra. Eveline, si no quieres que tu hijo acabe como tus padres, arrodíllate y discúlpate conmigo y con mi amiga Naomi, delante de la Corporación Whitman mañana. Si no...".

Los ojos de Lana parecían despiadados, mientras se acercaba al oído de Madeline y murmuraba: "Si no, verás morir a tu hijo en manos del hombre que amas".

Amenazó, con una sonrisa cada vez más arrogante.

Cuando se dio la vuelta, llamó a Jeremy: "Hans, la Srta. Montgomery está muy triste ahora mismo. Ya que te pareces a su esposo, deberás consolarla. Estaré esperando en el coche".

Lana se alejó, sintiéndose satisfecha consigo misma, mientras daba una calada a su cigarrillo.

Cuando Lana se fue, Karen se apresuró a hablar con Jeremy. Sin embargo, Jeremy ignoró a Karen y se dirigió directamente a Madeline.

Jeremy respondió con impaciencia: "Deja de hacerme repetir las cosas. No soy tu hijo".

"¡Eres mi hijo!". Karen replicó con firmeza: "Eveline también volvió con un nombre diferente en aquel entonces, así que no creo que haya dos personas exactamente iguales en este mundo. Tú eres mi hijo".

Jeremy no quería dar más explicaciones a Karen, así que se metió en el coche y se marchó.

Sin embargo, todavía tenía la fría mirada y las palabras de Madeline repitiéndose en su cabeza.

"¿En qué estás pensando?", preguntó Lana, al ver que Jeremy permanecía en silencio.

Jeremy levantó la cabeza. "¿Le prendiste fuego a la casa?".

"Tonto, ¿por qué iba a hacer eso? ¿Has olvidado que fuiste tú quien lo hizo?". La mirada de Lana era amorosa. "Hans, ¿te da pena Eveline? ¿Has olvidado cómo me abofeteó delante de ti? Tengo que hacerla pagar por ello, ¿de acuerdo?".

"No tenías que matar a sus padres".