Esposa Pecadora romance Capítulo 980

Habían pasado tantos años, y como su madre, esta era la primera vez que veía llorar a su hijo.

"Jeremy, tú...".

"Mamá, ¿puedes sacar a Pudin, por favor? Tengo algo que decirle a este tipo". Madeline controló sus emociones y le entregó al pequeño a Karen.

Aunque Karen tenía muchas preguntas, la obedeció y se llevó al bebé.

En ese momento solo estaban ellos dos en la habitación, y el silencio era ensordecedor.

Madeline se dirigió al lado de la cama y sacó unos documentos de debajo de la almohada para entregárselos a Jeremy.

"Firma esto. Quiero el divorcio".

Jeremy miró los papeles que Madeline le entregaba y sintió como si su corazón fuera rebanado por un millón de cuchillos.

Sollozó sin ruido y no tomó los papeles. Al contrario, se arrodilló de nuevo frente a ella.

Mirando el rostro adolorido de ella, él sintió tanto dolor en su corazón que no podía respirar. "Linnie...".

"Ya no me llames Linnie. No soy digna de ello".

Madeline rechazó con frialdad. Forzaba una sonrisa, pero las lágrimas brotaban incontrolablemente de sus ojos.

"Durante los días en que perdiste tus recuerdos, me repetía a mí misma que solo los habías perdido temporalmente y que pronto lo recordarías. Y que cuando lo hicieras, volverías a mí".

"Me equivoqué. No solo perdiste tus recuerdos, perdiste tu humanidad también".

"¡Prendiste fuego a mi casa y mataste a mis padres solo para hacer feliz a Lana! ¡También quemaste mi corazón, que te amaba, hasta convertirlo en cenizas!".

"Jeremy, no te perdonaré, no importa cuántas veces digas que lo sientes".

Ella respiró profundamente y cerró los ojos. Esta sería la última vez que pronunciaría su nombre.

"Jeremy, eres el hombre que más amo en mi vida y también el único hombre con el que he estado obsesionada y al que me he dedicado. Sin embargo, es hora de dejarte ir. A partir de ahora, Eveline Montgomery y Jeremy Whitman ya no serán marido y mujer. Rompemos todos los lazos entre nosotros".

Madeline le lanzó los papeles a Jeremy y pasó junto a él para salir de la habitación.

Lana y Naomi estaban bebiendo, en ese momento.

"Jum, no sé qué le pasa a mi hermano. ¿Por qué está ayudando a Eveline?".

"¿Yorick está enamorado de Eveline?", adivinó Naomi.

"Imposible. Mi hermano nunca se enamoraría de ella". Lana lo negó y se bebió su cerveza con rabia.

"Ni siquiera sé de qué se preocupa mi hermano. ¿Quién se atreve a ir en contra de nosotros, los Estigia Johnson, cuando estamos en el País F? ¡Eveline no es nada!".

Naomi asintió y miró la pantalla de su teléfono. De repente, sus ojos se iluminaron. "¡Lana! ¡Alguien me ha dicho que Eveline es ciega!".

"¿Qué?". Lana golpeó su taza sobre la mesa, nada más levantarla. "¿Eveline es ciega? ¿En serio?".

"¡En serio!". Naomi se rio alegremente.

Lana estaba tan contenta que no podía dejar de sonreír. Cuando estaba a punto de decir algo, vio entrar a Jeremy, así que inmediatamente se dirigió hacia él. "Hans, déjame darte una buena noticia. ¡Madeline es ciega!".