Esposa Pecadora romance Capítulo 979

Cuando Madeline sintió que la ayudaban a levantarse, se sorprendió. Sin embargo, al segundo siguiente, lo apartó.

"¿Linnie, eh? ¿A qué está jugando, Sr. Zimmerman?", Madeline se burló. "¿Estás aquí para verme hacer el ridículo porque sabes que soy ciega?".

Ella se rio y preguntó. Aunque no podía ver, se mantenía erguida y no se acobardaba ni mostraba un atisbo de miedo.

"Lana, escucha, aunque sea ciega, no voy a permitir que te salgas con la tuya. He llorado mucho estos días por tu culpa, ¡y te haré pagar el doble por ello!".

Mirando a la débil y a la vez fuerte mujer que tenía delante, Jeremy reprimió el dolor de su corazón y se acercó lentamente a ella.

"Linnie, lo recuerdo".

Cuando dijo esto, su voz suave y profunda viajó a los oídos de Madeline suavemente.

Fue como si todo se congelara en el tiempo mientras la sala se quedaba en silencio.

Madeline se quedó boquiabierta. Entonces, escuchó la voz familiar que repetía esas palabras.

"Linnie, lo recuerdo todo".

Los ojos claros de Madeline, que habían perdido la visión, se llenaron de lágrimas sin que ella lo supiera.

Después de un momento, comenzó a reír.

"¿De verdad? Por fin te acuerdas...", dijo Madeline con rotundidad.

"Deberías irte. No podemos volver a ser como antes. Vamos a ser enemigos si nos volvemos a encontrar". Ella se dio la vuelta lentamente.

Jeremy se acercó a ella y le tomó la mano. Luego se arrodilló frente a ella.

"Linnie. Linnie, lo siento mucho". Jeremy se disculpó, pero Madeline no demostró ninguna emoción.

"Ya no tienes que decir que lo sientes. Aunque me pidas perdón durante un año, dos años o incluso diez, nunca te perdonaré mientras viva".

Madeline apretó los puños mientras todo su cuerpo se estremecía.

"Linnie, por favor, cálmate. Dame una oportunidad para explicarte".

"¿Una oportunidad?".

Madeline sintió que esta palabra sonaba extrañamente absurda.

"Mis padres murieron porque te di una oportunidad".

"Experimenté tu crueldad antes, pero aún así, no pude dejarte ir. Maté a mis padres porque fui blanda y te perdoné".

"Jeremy, ¿crees que te daré una oportunidad? No. Nunca más, a menos que me devuelvas a mis padres".

Karen volvió con el vaso de agua. Cuando llegó a la puerta, escuchó la voz adolorida de Madeline.

Entró y vio a Jeremy.

Lo que más sorprendió a Karen fue que Jeremy tenía los ojos rojos y estaba llorando.