La cara de Abril se puso pálida, ya había visto el correo, no solo se lo había enviado al jefe principal, sino a toda la empresa.
Todo esto fue una trampa que Fiona había preparado de principio a fin.
¡Cayó en la trampa!
Si no puede manejarlo correctamente, no solo será castigada, sino que también puede afectar al departamento de marketing. En ese momento, todos en el departamento de marketing la evitarán, ¿quién la ayudará?
Tan pronto como entró a la sala de reuniones, todas las miradas se posaron sobre ella.
Hizo todo lo posible para mantener la calma, bajó la vista para mirar el informe sobre la mesa.
Filemón fue el último en entrar.
Ya había visto cuánto coraje tenía su esposa legal, no le sorprendió nada de lo que hizo.
El subdirector tosió levemente y dirigió su mirada hacia Abril, "Señora Rosales, ¿qué pasa con el correo que Elisa envió?"
Fiona mostró una sonrisa falsa, "La señora Rosales invitó a la gente del departamento de marketing a comer, probablemente quería fortalecer la relación entre los departamentos, ¿Por qué no invitarnos a nosotros también? Estamos todos en el mismo departamento. Incluso si hay competencia, deberíamos unirnos, ¿no?"
Este comentario parece ayudarla, pero en realidad es un golpe bajo, dejándola sin la excusa de fomentar las relaciones departamentales.
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