"David Terrén..." Antes de que terminara de hablar, las enormes manos de David volvieron a abrazarla.
Y luego, ella vio cómo su notablemente atractivo rostro se acercaba cada vez más. De repente, David la besó en los labios.
Él había estado deseando besarla durante mucho tiempo, desde aquel roce de hombros en el auto ayer, y desde el momento en que la besó por primera vez, aquella sensación suave y cálida que lo dejó cautivado.
Sus labios eran tan suaves que resultaba increíble, con un aroma indescriptible y un aliento suave y fresco. Su anhelo por sus labios nunca había cesado.
"David..."
Selena Morales se asustó con el beso repentino de él, y con ambas manos empujó su pecho, pero mientras más luchaba, David la sujetaba con más fuerza.
Justo cuando estaba a punto de detenerlo con palabras, su lengua se abrió paso en su boca, como si quisiera devorarla.
Un sabor dulce y profundo invadió aún más.
Sus expectativas no fueron en vano.
El beso de este hombre era dominante e irresistible.
Cuanto más se resistía ella, más firme se mostraba él.
La racionalidad de Selena le decía que no debía seguir luchando, así que se quedó allí, inmóvil, permitiéndole a este hombre mucho más alto que ella inclinarse y darle un beso profundo.
Sintió que todo el aire de su pecho desaparecía.
Su lengua cosquilleaba y sus labios ardían.
Su primer beso, su primer beso profundo, todo había sido robado por este hombre aparentemente educado pero en realidad dominante.
Poco a poco, dejó de pensar, pero aún podía sentir sus manos calientes detrás de su cintura, como fuego.
Escuchó la respiración profunda y cambiada de David cerca de su oído, y Selena agarró nerviosamente su camisa, quedándose allí mientras él la besaba.
Después de un tiempo, David la soltó lentamente y luego le dio otro pequeño mordisco en los labios, finalmente apoyando su cabeza en su frente.
"Respira, tonta".
Selena pareció despertar, parpadeó suavemente y comenzó a respirar profundamente, inhalando grandes bocanadas de aire. Después de varias respiraciones profundas, el oxígeno pareció finalmente llegar a su cerebro y sus pensamientos comenzaron a regresar. Fue en ese momento cuando Selena intentó apartarlo.


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