La Esposa de Lobo romance Capítulo 303

”¿Así que tú eres el amo de los Carmine? Llegaste temprano”, dijo Andrius con una sonrisa después de darle una mirada a Dexter.

No había forma de que recibiera a Dexter con frialdad, considerando que había llegado tan puntualmente y con tantas ganas de recibir su castigo.

Dexter se sorprendió un poco cuando vio la bicicleta eléctrica.

Sin embargo, ya que su conductor había hablado y parecía estar dirigiéndose al Jardín Real, debía tratarse del Rey Lobo.

Dexter tenía una sonrisa halagadora y quería inclinarse ante Andrius. “Rey Lobo…”.

“Padre, ¿de qué estás hablando?”. Peter jaló a su padre hacia atrás y le dijo con desdén: “Él es el hombre del que te hablé antes, el que estaba con Sonia. No es el Rey Lobo”.

La expresión de Dexter se volvió dura de inmediato.

¡El amo de los Carmine había estado a nada de confundir a alguien más con el Rey Lobo!

¡Sería muy vergonzoso si esto se supiera!

“Andrius Moonshade, este es el Jardín Real, la mansión privada del Rey Lobo”.

Peter mostró una expresión burlona mientras evaluaba a Andrius con arrogancia: “El Rey Lobo nos invitó a reunirnos con él. Es por eso que estamos esperando aquí”.

“Tú… Pareces un méndigo que viene a pedir dinero. Largo de aquí. No hagas un desastre. Tu presencia es una desgracia para una vista tan grandiosa como esta. Si el Rey Lobo regresa y te ve causando problemas…”.

Una intención fría apareció en el rostro de Peter. “Ofenderás al Rey Lobo. Él solo tendrá que decir una sola palabra para que no puedas ver el sol mañana”.

Él había dicho esto como si él fuera alguien muy importante. Había apartado la mirada tras dar esta advertencia, pero el desdén seguía presente en su rostro.

“¿En serio?”. Andrius sonrió y luego caminó hacia la verja.

“¿Qué estás haciendo?”. Peter se sorprendió por un momento antes de darse cuenta de lo que Andrius estaba intentando hacer. Entonces se burló: “¿Estás tratando de sacar una llave y decir que sacaste la equivocada? Te advierto que este lugar es lujoso y sofisticado, y todas las cerraduras son digitales. Para acceder, es necesario tener la huella digital y el patrón de voz. Es tecnología de alta…”.

Peter continuó presumiendo sin parar.

Andrius no estaba de humor para escuchar estas tonterías, por lo que desbloqueó la verja con la huella dactilar de su pulgar.

Dexter estaba atónito, con su frente cubierta de sudor y su caro traje empapado con este. Él pateó a Peter en la rodilla para obligarlo a arrodillarse ante el Rey Lobo antes de hacerlo él también.

“Rey Lobo, lo siento muchísimo por esto. Mi estúpido hijo…”.

Él se inclinó una y otra vez e incluso presionó la cabeza de Peter contra el suelo mientras lo hacía.

“Hablemos adentro”, dijo Andrius y soltó un gruñido frío antes de entrar a la mansión.

Dexter y Peter se pusieron de pie y lo siguieron adentro con expresiones mórbidas.

Dentro de la sala de estar, Andrius se sentó en el sofá con las piernas cruzadas mientras miraba a padre e hijo postrarse ante él.

“Rey Lobo… Debo estar ciego para no haberlo reconocido. Fui engañado, por eso dije cosas tan estúpidas. Me embrujaron…”.

Peter permaneció horrorizado mientras trataba de inventarse una excusa para justificar su comportamiento. Con cada excusa que daba, su frente se golpeaba ruidosamente contra el suelo.

A pesar de que su frente quedó hinchada después de algunos golpes, como Andrius se mantuvo en silencio, Peter no se atrevió a detenerse.