La Esposa de Lobo romance Capítulo 369

El doctor York entonces miró a Alec.

“Apúrense y encuentren a este tal Andrius Moonshade. ¡Traiganlo de regreso! Si todavía está aquí, ¡puede que haya esperanza para la dama Montecarlo!”.

Sus palabras confundieron a todos los presentes.

¿Andrius siempre tuvo la razón?

¡Se había ido hacía bastante tiempo! ¿Dónde podría haber ido?

Entonces, todos los demás en la sala miraron a Luna. Andrius era su marido, así que ella debía tener su contacto.

“¡Luna, llámalo! ¡Llama a Andrius de inmediato!”.

“¡Mi querida sobrina, apresúrate a llamarlo! ¡Haz que vuelva!”.

“¡Apúrate!”.

Luna sacó su teléfono con nerviosismo y llamó a Andrius.

“Andrius, ¿en dónde estás ahora? La abuela se desplomó. ¡Ven rápido! ¡Tienes que examinarla!”.

En el otro lado de la llamada, Andrius estaba enojado con los Conery, así que dijo directamente: “Le dije que esto pasaría e incluso preparé una píldora de longevidad para ella, pero no me hizo caso. ¿Ahora me estás diciendo que regrese a examinarla? Me niego”.

Qué ridiculez.

El prestigioso Rey Lobo había sido insultado por un puñado de idiotas.

La gente ofrecía millones solo para comprar la píldora que él elaboraba y refinaba, y la mayoría de las veces, ni siquiera una cifra astronómica conseguía que fabricara una sola píldora. Él había hecho la píldora por respeto y buena voluntad, pero Alec y los demás le habían faltado al respeto y se habían burlado de él.

Lo peor era que Jane había tirado la píldora y la había pisoteado, desperdiciando su esfuerzo. No podía tolerar que otros malgastaran su tiempo y su esfuerzo.

“¡Argh!”.

“¡Andrius! ¡Está actuando de una forma ridícula!”.

“Está actuando con arrogancia a pesar de que le estamos dando la oportunidad de regresar, ¿no?”.

“¡Hijo de p*ta! ¡Cuando regrese, le daré una lección!”.

Los Conery lo maldijeron con ira cuando Andrius les habló con arrogancia.

“Andrius…”. Luna estaba en una posición difícil. Si Andrius se rehusaba a regresar y su abuela no sobrevivía, entonces ella sería considerada una pecadora por la familia, ¡la causante de la muerte de su abuela!

Ella habló con un tono más suave y le rogó: “Andrius, cálmate. Por favor. Te ruego que regreses. Por favor, regresa y salva a mi abuela”.

“Andy…”. Rainbow también le rogó que regresara. “La abuela ya no puede esperar más. Sé que los demás son un poco duros contigo, pero te pido que los perdones”.

Como se habían rebajado hasta este nivel, Andrius ablandó. “¿Quieren que regrese? De acuerdo, pero tus familiares que se burlaron de mí deben disculparse conmigo”.

Como Luna había puesto el altavoz, todos pudieron escuchar la solicitud de Andrius.

Dado que estaba en juego la vida de la columna vertebral de la familia, ninguno de los familiares se atrevió a seguir discutiendo con Andrius. Por mucho que lo odiaran, reprimieron su ira y aceptaron sus condiciones.

“De acuerdo, Andrius. Si regresas ahora, nos disculparemos contigo”. Alec fue el primero en hablar y dar su palabra, pero parecía sombrío y reticente. Era obvio que no hablaba con sinceridad.

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