Aunque el Sr. Ismael asintió, en realidad no tenía ninguna intención de disculparse.
Después de todo, solo era un acuerdo verbal.
Si él no se disculpaba, ¿qué podía hacer Gabriela al respecto?
Quizás con el tiempo, Gabriela simplemente olvidaría el asunto.
Nazaret continuó: "Y sobre Wendy, ¿qué planean hacer con ella?"
El Sr. Ismael, sorprendido, levantó la mirada y preguntó: "¿A qué te refieres?"
Nazaret se lo explicó: "Wendy ha cuestionado repetidamente a la Srta. Yllescas por supuesto plagio, sin mostrar ningún arrepentimiento, lo que ha manchado la reputación de nuestra comunidad artística. Definitivamente, no es adecuado que ella permanezca en el mundo del arte. Su posición podría ser cubierta temporalmente por Jordi."
Eso sería, al menos, una forma de disculparse con Gabriela.
Al fin y al cabo, la comunidad artística realmente había actuado de manera deshonrosa en cuanto a este asunto. Si de alguna manera no se mostraban honestos, no solo sería difícil explicarle a Gabriela, sino también a la comunidad literaria.
Era bien sabido que las personas en el mundo literario eran extremadamente protectores con los suyos.
Al escuchar estas palabras, el Sr. Ismael frunció el ceño.
De entre todos los jóvenes talentos, Wendy era a quien más admiraba.
Que Nazaret sugiriera castigar a Wendy claramente no le agradaba al Sr. Ismael, "¡Este problema es solo mío! ¿Cómo podría involucrar a la Sra. Nunier? ¡Ella es una persona tremendamente talentosa!"
Nazaret apenas podía contener su frustración. "¡Cállate! Si no fuera por Wendy, las cosas no habrían llegado a este punto."
Tras decir esto, Nazaret se volvió hacia el Sr. Moreno. "Tú encárgate de esto."
El Sr. Moreno asintió. "Entendido."
El Sr. Ismael, aún insatisfecho, agregó: "¿Realmente es tan grave? La Sra. Nunier es un talento precioso para nuestra comunidad artística. ¿No es esto simplemente debilitarnos para complacer a otros?"
Según el Sr. Ismael, tenían la capacidad de cultivar su propio talento en la comunidad artística y no era necesario que se humillara ante la comunidad literaria, ni mucho menos ante Gabriela.
Nazaret, percibiendo la implicación en las palabras del Sr. Ismael, suspiró. "La comunidad literaria actual no es lo que solía ser. Haz lo que te digo."
El Sr. Ismael todavía quería argumentar, pero el Sr. Moreno se levantó y dijo: "Vamos, salgamos."
El Sr. Ismael fue llevado fuera por el Sr. Moreno.
En ese momento, un asistente llegó para informar a Nazaret. "Gran Anciano, el Sr. Mendoza y el maestro Rojas de la comunidad literaria están aquí."
Con el Sr. Ismael recién cuestionando a Gabriela por plagio y ahora con la llegada del Sr. Mendoza y el maestro Rojas, era evidente para qué venían.
¡Definitivamente venían a defender a los suyos!
Rápidamente, Nazaret ordenó: "Llévalos al salón de invitados. ¡Estaré allí en un momento!"
"Entendido," respondió el asistente.
Nazaret añadió: "Prepara un buen té para ellos."



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