La Heredera del Poder romance Capítulo 1144

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Al escuchar que estaba bien de salud, Amanda se alivió y sonrió diciendo: "Que bueno que no es nada".

Gabriela tenía una habilidad médica excepcional, incluso podía curar el cáncer; ahora que Gabriela decía que no había problema, definitivamente debía estar bien.

Gabriela continuó: "Por cierto, tía Amanda, ¿alguna vez has tomado píldoras anticonceptivas?"

"No", respondió Amanda, negando con la cabeza.

Gabriela frunció el ceño ligeramente, ¿podría haber escuchado mal?

Gabriela extendió su mano nuevamente para tomar el pulso de Amanda.

No estaba equivocada.

Según el pulso de Amanda, había tomado píldoras anticonceptivas.

Gabriela continuó: "Tía Amanda, aunque no haya tomado píldoras anticonceptivas, definitivamente ha consumido alimentos que contienen anticonceptivos. Ahora, muchos vegetales se rocían con hormonas vegetales, lo cual es muy malo para el cuerpo humano. En algunas personas jóvenes con buen físico, es posible que no se note, pero usted es diferente. No se cuidó bien después de dar a luz a Lys, y ahora ha consumido estos vegetales rociados con hormonas, lo que le impide quedar embarazada."

Incluso hubo casos donde se rociaron anticonceptivos en los pepinos.

Amanda se sorprendió y preguntó, "¿Qué debería hacer?"

Gabriela dijo: "Preste atención a su dieta, sería mejor comprar algunas herramientas para medir las hormonas y llevarlas a casa. Una vez que encuentre vegetales con exceso de hormonas, no los consuma."

"Está bien", asintió Amanda.

Gabriela continuó: "Más tarde te prepararé una medicina para desintoxicar tu cuerpo. Mantén un buen ánimo, y quién sabe, tal vez pronto llegue un hermanito o hermanita."

Amanda sonrió ampliamente, "Gabi, gracias."

"De nada."

Después de hablar sobre Amanda, Gabriela fue con ella al vestíbulo.

Lys estaba abrazando a Mimi, dándole besos por todos lados, hasta que ni siquiera se dio cuenta de que Gabriela había llegado.

"Lys", dijo Gabriela sonriendo.

Al escuchar la voz de Gabriela, Lys soltó a Mimi y corrió hacia Gabriela, gritando, "¡Grande Gabi!"

Mimi fue dejado en el suelo, maullando con tristeza.