La Heredera del Poder romance Capítulo 1336

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Sebastián miró a Gabriela y, con los labios apenas entreabiertos, dijo: "Menos hablar y más hacer".

¿Cómo hacer eso si uno tenía problemas del vigor del riñón?

Gabriela frunció ligeramente el ceño, sintiéndose un poco confundida por la conversación con Sebastián.

Sebastián tomó un pedazo de pollo y lo puso en el plato de Gabriela. "Come."

"¿Por qué menos hablar y más hacer es fundamental para una vida armoniosa? ¿Menos hablar de qué, más hacer qué?" Gabriela nunca se había enfrentado a un problema que no pudiera resolver. Sin embargo, esta era la primera vez.

En su vida pasada, nunca había tenido un novio, ni mucho menos se había casado. Era completamente inexperta en asuntos del corazón.

Sebastián, con un tono ligeramente sombrío, dijo: "Lo entenderás con el tiempo".

La práctica llevaba a la verdadera sabiduría.

Gabriela no volvió a preguntar, sabiendo que eventualmente lo comprendería.

...

Gabriela regresaría al día siguiente al mundo financiero.

La persona más contenta con esta noticia era Don Sanz.

Había esperado este día por demasiado tiempo.

Durante estos años, el Consorcio Sohi había dominado por completo a la familia Rey, y él había llegado a pensar que no viviría para ver al Consorcio Sohi volver a enderezarse antes de cerrar los ojos.

Pero como dice el dicho, el cielo ayudaba a aquellos con determinación.

Finalmente llegó el día que había estado esperando.

Para celebrar, Don Sanz fue especialmente a rezar y a hacer algunos votos.

No fue sino hasta las nueve y media de la noche que Don Sanz regresó de la capilla.

Ignacio estaba extremadamente preocupado porque Don Sanz había desaparecido desde la mañana y, hasta ese momento, no había regresado, temiendo que algo malo le hubiera sucedido.

Justo en ese instante, Ignacio vio una figura entrar por la puerta y rápidamente corrió hacia ella. La luz tenue del farol iluminó el rostro de Don Sanz e Ignacio, con un brillo en su mirada, exclamó emocionado: "¡Sr. Sanz! ¡Por fin ha vuelto!"