La Heredera del Poder romance Capítulo 1445

Jordan siempre había detestado a ese tipo de personas.

Al escuchar la voz de Jordan, Sean detuvo sus pasos.

Sabía lo que esto significaba.

La amistad entre Jordan y él había llegado a su fin.

Sean apretó los dedos y tomó una profunda respiración.

Los recuerdos del pasado vinieron a su mente, dejándolo con un dolor inmenso por dentro.

Jordan sacó las llaves y abrió la puerta de su casa.

Vivía solo.

El departamento de tres habitaciones carecía de cualquier aroma hogareño.

Al cambiar sus zapatos por unas pantuflas, él se dirigió a la cocina, sacó una lata de cerveza del refrigerador, abrió la lata con una mano mientras con la otra borraba a Sean de WhatsApp.

Ya que habían terminado su relación, no tenía sentido mantenerlo en sus contactos de WhatsApp.

Solo se sentía bastante mal por Paloma.

Debería haber insistido en que Sean se disculpara con ella.

Con ese pensamiento, Jordan tomó otro gran sorbo de cerveza.

...

Consorcio Sohi.

"Quiero ver a la presidenta Yllescas."

Fausto acababa de entrar al vestíbulo cuando notó a un hombre de alta estatura, vestido con un traje de color gris humo, de postura erguida. Lo que llamó la atención de Fausto fue lo que dijo el hombre.

¿Quería ver a la presidenta Yllescas?

¿Quién era la presidenta Yllescas?

Gabriela.

Gabriela había hecho que Paloma pasara por bastantes malos momentos, y ahora, al escuchar su nombre de boca de este hombre, Fausto frunció el ceño, ralentizando el paso y mirando hacia donde estaba el hombre.

Sentía una gran curiosidad por saber cuál era la relación entre este hombre y Gabriela.

¿Sería Sebastián Zesati?

La recepcionista miró al hombre y le dijo con cortesía: "Señor, ¿tiene usted una cita previa?"

"Soy el tío de la presidenta Yllescas, Sergio Yllescas." El hombre sonrió. "¿Desde cuándo necesitaba un tío una cita para ver a su sobrina?"

¿Su tío?

¿El tío de Gabriela?

Fausto entrecerró los ojos.

¿Acaso Paulina Yllescas había tenido un hijo?

¡El viejo Mauricio Yllescas tenía un nieto!

¿Pero cómo era eso posible?

¿Cómo era posible que nunca había escuchado que Paulina tuviera un hijo?

¡Cómo podría Mauricio tener un nieto!

De repente, Fausto se sintió demasiado mal.

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