La Heredera del Poder romance Capítulo 167

Jana le reprendió, "¡Cállate! Esa mujer, ¡ella no merece que la llames madre! ¡Ella menos merece ser una madre!"

Adam se giró hacia Jana y preguntó. "¿Mi madre realmente nunca murió?"

"¡Ya te lo dije! ¡Ella no es tu madre!" Jana, al terminar de decir eso, parecía darse cuenta que había elevado demasiado la voz, y agregó: "¡Adam, ella realmente está muerta!"

De repente, Adam levantó la cabeza y miró directamente a los ojos de Jana preguntando. "¿Mi madre realmente está muerta?"

Esa mirada, no era propia de un joven de 18 años.

Era como si quisiera ver a través de Jana.

Ella, sintiéndose un poco culpable, evitó la mirada de Adam, "¡Sí, murió!"

¿Para qué seguiría viviendo una mujer como Sofía?

¡Mejor que muera pronto y alcance la paz!

Jana nunca había deseado tanto como ahora que Sofía muriera rápidamente de una enfermedad terminal.

Por la forma en que Adam reaccionó, estaba claro que no estaba satisfecho.

"Quiero verla." Continuó Adam: "¿Tiene alguna foto de ella?"

Jana suspiró nuevamente y dijo, "¡No, tu abuela siempre supo que eras un buen niño! Esa mujer realmente no tiene derecho a ser tu madre. ¡Solo tu tía Olga tiene derecho a serlo! Ya sea por su familia o por cualquier otra cosa, ella es especialmente adecuada para tu padre. ¡Ella ha estado esperando a tu padre toda su vida, y no podrás soportar verla esperar más, verdad?"

Ángela tenía razón.

Una mujer, ¿cuántos dieciocho años más puede tener?

Olga le dio sus mejores años a Rodrigo, y Rodrigo debería darle una explicación.

"¡Ella no tiene derecho a ser mi madre!" El tono de Adam era frío, "Abuela, cualquier persona puede ser mi madrastra, menos Olga."

En su emoción, Jana comenzó a toser violentamente y dijo. "¡Qué te pasa, niño! ¡Olga te crió desde que eras pequeño! ¡Cómo puedes hablar así de ella!"

Ese chico siempre parecía razonable.

¿Por qué no podía entender las cosas importantes?

Prefería reconocer a una mujer promiscua como su madre, y no dejar que Olga sea su madre.

Jana tosió cada vez más fuerte, como si quisiera expulsar incluso sus pulmones.

Adam continuó diciendo, "Abuela, quiero ver a mi madre una vez, solo una vez, ¿puedo?"

Desde pequeño hasta ahora, Adam nunca había tenido tanto deseo de ver a su madre.

Quería verla.

Quería saber si su madre era como la de sus sueños.

Se dice que la apariencia refleja el corazón, y quería ver si su madre era realmente tan despreciable como su abuela decía.

Además, él creía que su madre todavía estaba viva en este mundo.

Quería verla en persona.

Quería preguntarle en su cara, si realmente había abandonado a su padre y a él en aquel entonces.

De lo contrario, no estaría satisfecho.

¡No estaría satisfecho!

No creía que en este mundo, realmente hubiera alguien capaz de ser tan cruel como para abandonar a su propia carne y sangre.