La Heredera del Poder romance Capítulo 577

Valeria claramente despreciaba el regalo que Gabriela había preparado.

En términos de estatus, ¡era muchísimo más distinguida que Gabriela!

¿Gabriela pensaba ganarse su favor con una simple bufanda?

¡De ninguna manera!

"Gracias," dijo Valeria con una sonrisa, rechazándola cortésmente. "Pero soy alérgica a todo excepto a HERMES, cualquier otra marca me provoca alergia. Aprecio el gesto, ¡de veras que lo hago!"

HERMES era una marca de renombre internacional.

Aunque Valeria no esperaba que Gabriela supiera eso.

Después de todo, ella era solo una campesina sin experiencia.

¡Si supiera lo que es HERMES, no habría traído una bufanda tan mediocre!

¡Qué vergüenza!

Al ver que Valeria rechazaba el regalo, Inés tampoco lo aceptó. "En mi casa tengo muchas bufandas, todas nuevas y sin usar. Incluso tengo una de GUCCI que ni siquiera he desempacado. ¡Aceptarla sería un desperdicio!"

Gabriela, no obstante, no se mostró incómoda y dejó la caja de regalo sobre la mesa.

A Bárbara, sin embargo, le encantó la bufanda que ella había traído. En sus vastos llanos, era raro encontrar productos de seda auténtica; la mayoría eran imitaciones.

"¡Gracias, Gabriela! Me encanta," dijo Bárbara con entusiasmo.

"No hay de qué." Gabriela sonrió levemente.

Mientras hablaba, Bárbara se ataba la bufanda alrededor del cuello. "Gabriela, ¿te parece que me queda bien?"

Era evidente que realmente le gustaba la bufanda.

"Te queda bastante bien," respondió Gabriela asintiendo.

Inés miró con desprecio.

Solo era una bufanda.

Mirando a Bárbara, parecía que nunca había visto algo de calidad en su vida.

Claramente, 'dime con quién andas y te diré quién eres'.

Alguien como ella, de clase alta, debería asociarse con aristócratas como Valeria.

Bárbara y Gabriela, pertenecientes a una clase más baja, deberían relacionarse entre ellas.

...

Mientras tanto, en el dormitorio masculino.

Adam estaba haciendo una videollamada con Santiago, Kelvy e Ian.

Ian también estaba en la Universidad de Ciudad Real, aunque no compartía dormitorio con Adam.

Kelvy y Santiago estaban en la Universidad del Mar de Coral, justo al lado.

"Ian," dijo Adam, "cuando termines de arreglarte, bajas a buscarme."

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