Cuando Nicole levantó la vista, Clayton ya se había acercado con una sonrisa extremadamente gentil en su rostro. Sus ojos estaban llenos de calidez y cariño al mirarla.
Las comisuras de la boca de Yvette se torcieron. Ella no esperaba que él apareciera tan coincidentemente.
“¡Encárgate de la factura, Señor Sloan!”.
Clayton asintió y sacó su tarjeta, entregándola a la gerente de la tienda, quien estaba a un lado.
“Esto es algo que debería hacer. Deberías llamarme más a menudo para este tipo de cosas en el futuro”.
La sonrisa de Yvette se puso tensa.
Por el contrario, la sonrisa de Nicole solo se profundizó y ella no lo detuvo.
"¡Entonces tiene que trabajar duro, Señor Sloan!".
Clayton asintió solemnemente, un toque de alegría en su hermoso rostro.
"No te preocupes. Me encargaré de todas las facturas a partir de ahora”.
Eso era exactamente lo que él quería.
La gerente de la tienda terminó de deslizar la tarjeta y se la devolvió a Clayton. “El total fue de cuatro millones setenta mil dólares. Por favor, vuelvan, honorables invitados”.
Nicole asintió. Después de todo, ellas habían usado dos botellas de aceites esenciales extremadamente costosos, por lo que se esperaba este precio.
Yvette estaba un poco sorprendida.
No era que no pudiera pagarlo, pero esa cantidad era realmente sorprendente.
Clayton estaba muy tranquilo como si el dinero que había gastado no le perteneciera. Él casualmente tomó la tarjeta y la metió en el bolso de Nicole.
"¿Qué quieres comer?".
Nicole no vio su pequeña acción porque había estado respondiendo al mensaje de Logan con la cabeza abajo.
“Abrió un nuevo restaurante aquí abajo. ¿Por qué no lo probamos?”.
Yvette no tenía opiniones. Ella se sintió hambrienta repentinamente.
Clayton fue a tomar el bolso de Nicole, luego la tomó del brazo con familiaridad y caminó hacia adelante, sin molestarla para que respondiera el mensaje.
Su consideración era evidente en los detalles más pequeños.
En la mesa del comedor.
Yvette se sentó adentro y Nicole se sentó afuera, frente a Clayton.
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