La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1410

La Señora Carter le habló con calma.

"Suficiente. No importa lo que yo diga. Él es el favorito del Viejo Amo, por lo que su palabra es la palabra del Viejo Amo”.

“Hermana, ¿qué quieres decir con eso? ¿Estás tratando de trazar una línea entre nosotras? ¡Soy tu hermana!".

Claire estaba ansiosa y asustada.

“Simplemente no tienes permitido asistir a los eventos públicos de la familia Carter en el futuro. Estás pensando demasiado”.

La Señora Carter terminó de hablar y se dio la vuelta para irse.

Claire la siguió. “¿Qué hay de mi Riley ayudando en la Corporación Carter? Él regresó especialmente para ayudar a Ian”.

Un rastro de impaciencia cruzó los ojos de la Señora Carter.

“Hablemos de eso más tarde. Como puedes ver, el Viejo Amo solo cree en Ian ahora. Él no me escucha en absoluto”.

"Y, ¿qué hay de Riley?".

La Señora Carter dijo: "Solo déjalo regresar a Libertad. ¿No le iba bien allá? ¿Por qué le dijiste que volviera?".

Claire se quedó sin palabras y se detuvo en seco.

......

Nicole sostuvo el brazo de Clayton y quiso ver si todavía estaba enojado o no.

Cuando se dio la vuelta hacia un lado, vio una sonrisa amable en la comisura de los labios de Clayton mientras la miraba con afecto.

Ella se quedó atónita por un segundo. "¿Estás tan feliz?".

Clayton le sujetó la mano con fuerza.

"Por supuesto. Estoy muy feliz hoy".

"Si te gusta que te regañen, significa que valió la pena que confundieras a alguien más conmigo, ¿eh?".

Los ojos de Clayton parpadearon y de repente, él se inclinó hacia el oído de ella.

"Ella no vale la pena, pero tú sí".

Nicole levantó sus cejas. "¿Eso crees?".

“Nunca te había visto tan enojada. Te veías muy hermosa. ¡Estaba simplemente hipnotizado!”.

Su voz era seductora y le provocaba un poco de cosquillas. Su tono era bajo y suave, extremadamente agradable de escuchar, como si pudiera agitar su corazón.

La expresión de Nicole no cambió, pero sus orejas se pusieron un poco rojas.

"¿Qué tonterías estás diciendo?".

Ella apresuró sus pasos y trató de apartar su mano, pero fue en vano. Él la sostuvo con fuerza.