La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1471

Lance tomó la mano de Yvette y registró sus huellas dactilares en la puerta.

Yvette sentía que su mano estaba un poco caliente, pero retirarla sin más la haría parecer pretenciosa.

Ella lo miró. El perfil lateral de Lance era muy apuesto, profundo y límpido a la luz. Siempre daba la impresión de calidez en la superficie, pero del tipo que era confuso.

Después de registrar sus huellas dactilares, Lance soltó a Yvette. "Listo. La próxima vez que vengas, puedes entrar directamente”.

Yvette se apresuró a retirar su mano, asintió y miró hacia otro lado.

Lance sonrió y la llevó adentro.

“Esta casa no es una compra reciente. Después de reservarla, nos olvidamos de ella y nunca vivimos aquí. A mi madre le gusta esta zona. Ella estuvo mirando casas en el área, y ésta estaba disponible. La decoración es decente, así que simplemente la limpié y tomé este lugar como nuestra. No te importa, ¿verdad?”.

Yvette sacudió la cabeza rápidamente.

"No”.

¿Cómo podría importarle?

Esta casa era muy cara. No podía encontrar nada malo en ella.

¿Por qué iba a importarle que la hubiera comprado antes?

A menos que un burro le diera una patada en la cabeza.

Lance dijo: “Las raíces de la familia Sheldon están en Cali. Aunque tenemos tratos comerciales aquí, nuestro enfoque principal no es aquí. Esta es solamente nuestra casa temporal. Elegiremos una fecha para traerte de vuelta a casa para visitar. Mientras estemos aquí, nos quedaremos aquí, ¿te parece?”.

Él le estaba pidiendo pacientemente su opinión.

Lance incluso usó palabras como “volver a casa”, dando a entender que ya la consideraba su esposa.

El rostro de Yvette estaba ardiendo.

Ella frunció los labios y volvió a mirarlo.

“Lance, siento que estoy soñando ahora mismo…”.

Lance se congeló y sonrió. “Antes de hoy, también sentía que estaba soñando”.

Él se encogió de hombros para expresar cierta impotencia.

“Pero así son las cosas. Ya no se puede cambiar”.

Yvette se mordió el labio inferior y se sintió un poco avergonzada.

“Sabes, tengo una experiencia amorosa bastante abundante… acabo de terminar con alguien hace dos días…”.

Lance se rio y se quedó muy tranquilo.

“Bueno, ya terminaron, ¿no? Entonces no soy un tercero. Mi pasado tampoco es precisamente una hoja en blanco. Mientras no te importe, estaremos bien”.

Su voz era cálida y clara, con un sentido de perseverancia.

La franqueza y el autodesprecio de Lance hicieron que Yvette de repente dejara de lado su agobio y su desconfianza.

No era de extrañar que la Señora Quimbey, quien era una persona tan exigente, solo tuviera elogios para Lance.

Yvette no pudo encontrar ningún defecto con este hombre después de pasar tiempo con él.

¿Cómo podía existir una persona así en este mundo?

Las cejas de Yvette se crisparon. Finalmente levantó la vista para mirarlo y dijo con sinceridad: “No estoy segura de cómo deberíamos seguir adelante…”.

Lance se quedó atónito y sonrió. Su voz era cálida y firme. “Podemos ir conociéndonos poco a poco. Seamos francos el uno con el otro, como amigos, para que no tengamos una ruptura y podamos resolver cualquier problema a tiempo. Es normal que te tome un rato adaptarte a nuestra nueva relación, podemos tomarnos nuestro tiempo. De amigos a amantes, y eventualmente a una pareja casada. ¿Te parece bien?”.