La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1506

Hans aún no entendía por qué el Señor Sheldon permitió que esta chica delicada tomara su lugar.

Él ni siquiera miró los currículums de los muchos otros talentos sobresalientes en su escritorio.

Sin embargo, pensándolo bien, tenía sentido. Era una buena oportunidad para cultivar sentimientos.

¡Lance realmente podía ver el panorama general!

La mente de Yvette estuvo ocupada y confundida durante mucho tiempo.

Los otros empleados no tuvieron opiniones inesperadas sobre el cambio repentino de asistentes. Todos seguían enfocados en su propio trabajo.

Para ellos era solo un cambio de personal.

Por lo tanto, no tomaron la iniciativa de acercarse a preguntar qué estaba pasando, ni especular sobre los orígenes de Yvette.

Simplemente las cosas que debían informar a Hans ahora le informaban a Yvette.

La mente de Yvette estaba hecha un lío mientras tomaba nota de todo. En un abrir y cerrar de ojos, su cuaderno salió volando hacia alguna parte.

El flujo de personas que entraban y salían finalmente disminuyó. Ya estaba oscuro cuando Yvette levantó la mirada.

Ella miró la hora. Eran las 8:00 p.m.

Yvette estaba emocionada y de repente se puso de pie.

¡Ella nunca había sido del tipo de persona que trabajaba horas extras!

Justo cuando estaba a punto de abrir la puerta y salir, vio a Lance planeando entrar.

Tan pronto como los dos se miraron, Yvette se sintió agraviada.

10 millones de dólares no eran suficientes. ¡Tenía que pagarle por lo menos 20 millones!

Lance sonrió y se acercó. “No estás acostumbrada ya que acabas de empezar, ¿verdad? ¿Tienes hambre? Te llevaré a comer algo”.

Yvette lo empujó y caminó hacia adelante con su bolso.

"No me importa. Es hora de salir”.

Lance asintió y caminó detrás de ella.

Yvette lo miró y habló en voz baja.

"No me sigas, otras personas nos verán".

Lance frunció el ceño. “No hay nadie alrededor. ¿Quién nos verá?”.

Yvette se quedó atónita y miró a su alrededor. Efectivamente, además de las luces brillantes y el edificio de oficinas vacío, parecía que los dos eran los únicos que quedaban.

"¿Cómo es posible?".