La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 159

Gerard Lichman se acercó a Nicole emocionado. Estaba radiante de alegría.

“¡Nicole, hemos decidido dar una conferencia de prensa mañana para anunciar esta buena noticia de que estamos a la vanguardia de todo el mundo en tecnología médica!”.

Nicole tenía la misma idea por temor a que alguien se les adelantara. Se rio y se vio afectada por el buen humor de Gerard.

Era como si no hubiera escuchado la conversación de Gerard con Eric antes.

“Bien. Estaré allí a tiempo”.

“Sunner, ¿quieres unirte?”. Gerard estaba esperando ansiosamente su respuesta.

El nombre de Maverick podría impulsar este proyecto aún más hacia la cima de la pirámide.

Maverick sacudió la cabeza en señal de rechazo. Su decisión era clara.

Gerard se sentía decepcionado, pero no se atrevía a forzar a este genio de nivel divino.

Los ojos oscuros de Eric miraban fijamente el brazo de Nicole. Era raro que él no se agitara por ello.

Sin embargo, a Nicole no le importaba.

“¿Cómo está tu herida? ¿Deberíamos posponer la conferencia de prensa?”.

Eric la miró. Su respiración se hizo más lenta de repente.

Nicole levantó las cejas y lo miró. Las comisuras de sus labios curvados mostraban indiferencia.

“No puedo morir todavía. Gracias por tu preocupación, Señor Ferguson”.

‘¡Deja de actuar! ¡Qué ridículo!’, pensó Nicole.

Luego se dirigió a Maverick, quien estaba a su lado. “¿Nos vamos a casa?”.

Maverick asintió, le puso a Nicole el abrigo que llevaba colgado del brazo y se lo abrochó pacientemente por ella.

Aunque el abrigo le quedaba grande a Nicole, le daba un aspecto muy tierno y juguetón.

Esta escena sorprendió a Gerard. ‘¡¿Cómo es posible que la mano de un dios capaz de hacer milagros se utilice para abotonar un abrigo?!’.

Eric fue despreciado por Nicole y pudo escuchar la frialdad y el sarcasmo en sus palabras. Su corazón se hundió ligeramente.

Su rostro ya estaba sombrío, así que cuando vio a Maverick y a Nicole tan íntimos, el ceño de Eric se frunció más.

‘¿Casa? ¡¿Qué clase de relación tienen para que ella diga ‘vamos a casa’?!’.

Su corazón estaba envuelto en un ligero escalofrío.

“¿Necesitan que los lleve a los dos por separado?”, preguntó Eric de repente.

Incluso Gerard se sorprendió por esto. ‘¿El Señor Ferguson será el chófer de alguien? ¡Increíble!’.

Nicole puso los ojos en blanco. “No vas por el mismo camino que nosotros”.