La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1611

Como todo estaba ya predeterminado, lo que hacía también era inútil. ¿Por qué Eric necesitaba mostrarse patéticamente para engañarse a sí mismo?

Cerró los ojos. Al menos Nicole seguía viva. Él debía sentirse incomparablemente feliz por eso.

Mitchell escuchó la orden de Eric y se congeló por un momento.

Cuando Mitchell vio que Eric cerraba los ojos, sabía que él no se haría eco y que no lo había escuchado mal. Le respondió y salió a prepararle algo de comida.

Eric terminó de comer con dificultad. Mitchell pensaba que había sido el consejo de Keith el que lo había hecho entrar en razón y que éste estaba dispuesto a volver a la compañía para ser un gran líder de nuevo.

Luego, Eric fue a ducharse, se cambió de ropa y salió luciendo pulcro y meticuloso.

Mitchell vio a Eric así y se sintió aprensivo.

“Presidente…”.

Eric miró a Mitchell sin ningún rastro de emoción en sus ojos, pareciendo la calma del mar profundo, tranquilo pero peligroso.

“Voy a buscarla… Una última vez”.

La voz de Eric llevaba una tristeza incesante, pero trató de contener sus emociones.

Mitchell hizo una pausa. “Entendido. Me pondré en contacto con Logan inmediatamente”.

Ya que era la última vez, no debían ser sigilosos al respecto.

…

Clayton estaba haciendo su último chequeo y preparándose para ser dado el alta del hospital mañana.

Nicole no salió antes, pero a Yvette y Julie no les importó. Fueron al hospital a buscarla con una gran bolsa de cosas.

Afortunadamente, no había otros pacientes en este piso. De lo contrario, habría sido un inconveniente.

Kai actuó como un extra para las chicas ya que Julie no quería ir a una cita con él, sino que quería elegir un vestido de novia con Nicole e Yvette presentes.

‘¿Qué hay que elegir? ¡De igual manera todos son blancos!’, pensó Kai.

Yvette se puso uno de los vestidos alegremente. Salió, giró frente a ellas y preguntó emocionada: “¿Qué tal este?”.

Todos eran los últimos modelos traídos de aquella tienda de novias, dos de los cuales eran modelos privados hechos a la medida. Cada uno se veía increíble, así que Yvette tenía que elegir uno bien.

Nicole se quedó mirando y frunció ligeramente el ceño. “¿La espalda está completamente expuesta?”.

La espalda de Yvette era preciosa, y ella era muy buena aprovechando sus puntos fuertes. Las escápulas de su espalda lucían delicadas y proporcionadas, y su espalda no tenía ni rastro de grasa. Era tan exquisita como una obra de arte.

Yvette asintió y levantó la barbilla.

Yvette se quedó atónita y tomó apresuradamente el teléfono de Nicole con la intención de borrar el video.

Vio que ella no le había dado clic en el chat y se sintió aliviada al darse cuenta de que Nicole solo estaba bromeando.

Yvette la miró fijamente. “¡Tú también te has vuelto malvada!”.

Julie le instó a Yvette desde un lado. “Date prisa y ponte el otro…”.

La atención de Yvette se desvió inmediatamente. Entonces, se dirigió alegremente al cuarto.

Los demás no pudieron evitar mirarse y reírse. Entonces escucharon que llamaban a la puerta desde fuera.

Era Logan y él entró.

“Presidenta…”.

Nicole hizo una pausa y lo miró con una sonrisa. “¿Qué pasa? ¿El doctor terminó de hacerle el chequeo a Clayton? ¿Ya están listos sus procedimientos de alta?”.

Logan dudó un momento y frunció los labios.

“No, Mitchell llamó hace un momento y dijo que el Señor Ferguson quiere verla”.