La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 163

Ines Xavier había dejado la secundaria tras acosar a sus compañeros y fue enviada al extranjero para un año de “reforma”.

Cuando Ines regresó a Mediania, se enamoró de Eric Ferguson, pero al confesarse, fue rechazada. Más tarde, se fue a Corea para realizarse una cirugía plástica facial completa, así que todos sus rasgos faciales dejaron de ser naturales.

Desde que Ines se enteró del divorcio de Eric, ella volvió rápidamente a Mediania.

Sin embargo, lo que más llamaba la atención de todos era la segunda parte de la grabación.

“Señorita Xavier, ¿tu actitud hacía mí se debe a Eric Ferguson?”.

“Nunca he tenido la costumbre de volver a recoger la basura. En cambio, ¡deberías decirle a él que no se acerque a mí!”.

“¿Quieres sepultar a Fabian? Pues, voy a promoverlo. ¡Te mostraré quién es la que realmente manda aquí!”.

...

La sección de comentarios explotó en un instante.

[¡Dios mío! ¿Qué tan segura tienes que ser para decir eso? ¡Nicole es #perfección!].

[¡La Presidenta Nicole es simplemente una ganadora en la vida! Tiene cientos de miles de millones de fortuna familiar, así que ¿por qué debería preocuparse por un ex esposo? ¿No es mejor buscarse un joven galán?].

[¡Gracias, Presidenta Nicole, por gustar de nuestro pequeño y atractivo Fabian!].

[La Señorita Xavier es una puta en busca de atención. ¡Debería irse al infierno!].

[¡El temperamento de la Presidenta Nicole es tan brutal! ¡Ella siempre será mi diosa!].

[No importa que tan rica sea esa “salchicha” añeja, pienso que la “carne” fresca siempre sabrá mejor, ¿eh? *guiño guiño* ¡La Presidenta Nicole tiene buen ojo para ir a por los jóvenes guapos!].

…

La única consecuencia de esta grabación era que todo el mundo pensaba que el tipo favorito de Nicole eran los jóvenes sensuales.

Corporación Ferguson.

La temperatura pareció bajar bruscamente en la oficina de Eric.

Había un silencio total a su alrededor.

El rostro de Eric estaba envuelto en una oscura penumbra y su cuerpo emitía un frío abrumador que hacía que Mitchell se estremeciera.