La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 1903

Yvette no se negó. Ahora, ella estaba en un callejón sin salida con Lance, no sobre Whitney. Era debido al viaje de negocios a Cali.

Sin embargo, a Lance le gustaba mezclar los dos asuntos.

En la oficina de Lance.

Lance se sentó en el sofá y señaló el lado opuesto, luciendo como si estuviera listo para negociar.

“Vamos a sentarnos a hablar”.

Yvette se sentó, pero no inició la conversación.

El asistente afuera sintió una fría tensión entre Lance e Yvette. Por curiosidad, el asistente entró descaradamente a la oficina para servir el café.

Lance, quien estaba originalmente calmado, de repente tenía los ojos rojos. Él gritó fríamente: "¡Fuera!".

El asistente estaba tan asustado que se fue a toda prisa.

Yvette miró a Lance, quien rara vez perdía los estribos, y de repente se echó a reír.

Lance la miró con frialdad.

"¿De qué te ríes?".

Yvette dijo: “Querías gritarme a mí mejor, ¿verdad?”.

Lance arrugó las cejas. Yvette no le dio oportunidad de hablar.

“Realmente quiero ir y no es porque estoy enojada contigo. Quiero intentarlo por mí misma para ver qué tan lejos puedo llegar sin la protección de ustedes”.

Lance se quedó en silencio por un momento. Él levantó los ojos para mirarla.

“Puedes ir a cualquier otro lado para encargarte de otros proyectos. Solo elige. ¿Crees que Cali es una broma? ¡¿No sabes lo peligroso que es allá?!”.

Yvette frunció los labios y lo miró con las cejas arqueadas, lo cual hizo que a Lance se le quedaran atascadas las palabras en la garganta.

Lance se frotó la frente y respiró hondo.

“¿Sigues culpándome? Si hubiera sabido que ella era ese tipo de persona, nunca la hubiera dejado aparecer frente a nosotros. Yo realmente…".

Al ver la mirada de dolor e impotencia de Lance, Yvette se acercó y lo abrazó suavemente.

Lance estaba atónito, pero rápidamente extendió la mano para tomarla entre sus brazos y abrazarla con más fuerza.

“Yvette, si me culpas por eso, adelante, golpéame o regáñame. Simplemente no digas que te vas. Solo sé franca conmigo si tengo la culpa, ¿de acuerdo?”.