La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 196

¡Esa no era una cantidad pequeña!

¿Quién podía permitirse el lujo de comprar eso?

Por lo tanto, la sala de chat en directo estaba alborotada, pero nadie se atrevía a pujar por ella.

El número de ceros después del primer número dejó a todos deslumbrados y asombrados.

Cuando el presentador en directo anunció este artículo valorado en dos mil millones de dólares, nadie dijo nada.

Se trataba de una pequeña isla tropical privada llamada Isla Tigre.

¿Quién compraría una isla por Internet?

El presentador tenía la intención de usar esto como un truco para atraer a más espectadores.

Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos, la isla se vendió.

La identificación del comprador: @BebéRica!

Al instante, la sala de chat de la transmisión en directo se convirtió en un alboroto.

La cuenta de Nicole reapareció en público.

En ese entonces, ella derrochó $800 millones para comprar toda la sesión de transmisión en directo y le ordenó a la persona que transmitía en directo que comprara para ella en Europa.

Ahora, gastó $2 mil millones con un chasquido de dedos para comprar una pequeña isla privada en los trópicos.

Resultaba que para la gente rica el dinero era solo una serie de números.

Nicole seguía sin darse cuenta de que acababa de convertirse de nuevo en un tema candente de discusión.

Después de que Nicole se lavó y volvió a salir, Tigger se puso de puntillas. "Mamá, compré un tigre pequeño…”.

Los labios de Nicole se crisparon. Miró su celular y pensó que estaba viendo cosas.

Había un recordatorio del banco. [¡Pago de $2 mil millones exitoso!].

¡La Isla Tigre, una pequeña isla tropical, ahora le pertenecía a Nicole!

Los ojos de Tigger se abrieron de par en par por la emoción mientras sonreía y saltaba alegremente. Luego se acurrucó en sus brazos.

Nicole no se inmutó.

Aunque no era una cantidad pequeña, el dinero ya estaba gastado de todos modos.

Por otro lado, comprar una isla no era realmente tan útil...

Nicole seguía pensando en formas de utilizar esa isla cuando escuchó el grito de Kai desde la cocina.

"¡¿Quién se gastó mis dos mil millones?!".

Nicole se quedó perpleja y miró atentamente el mensaje de texto del banco.

Se dio cuenta de que esa tarjeta estaba vinculada a la cuenta de Kai. '¡Genial! ¡Acabo de ahorrarme $2 mil millones!'.

Kai salió corriendo de la cocina agarrando su celular y mirando con amargura a su hermana. "¡¿Por qué?!".

Nicole sonrió con indiferencia y explicó sin prisa: "Para celebrar el hecho de que me hice cargo de la compañía y obtuve una ganancia de mil millones de dólares en tan poco tiempo, me compré una pequeña isla".

Kai sentía una punzada de angustia que era inexplicable. '¡¿Ella obtuvo mil millones pero lo celebra gastando dos mil millones?!'.

Él se dio la vuelta para mirar a Floyd Stanton, quien acababa de salir.

"Papá, ¿estás seguro de que Pequeña N no traerá pérdidas a la compañía?".

Yvette vio a Nicole y le hizo un guiño ambiguo.

Sacudió la cabeza y no pudo evitar burlarse de Nicole. "Señorita Stanton, eres realmente muy generosa con tu dinero, ¿eh?”.

Nicole sonrió tímidamente: "¿Puedo decir que fue un clic erróneo?".

‘Tigger debió haber hecho un clic erróneo. ¿Qué malas intenciones podría tener? A Tigger le debe haber gustado el nombre de esa isla... Es una pena que nadie me crea si lo digo en voz alta. No tengo más remedio que admitir que fui yo…’.

El cantinero miró a Nicole con un respeto sublime en los ojos.

Le puso un trago de tequila en frente. Nicole sonrió, lo cogió y se lo bebió.

"Gracias”.

“Ahora acabas de perder a otro grupo de admiradores que pretendían cortejarte. No muchos pueden permitirse tus hábitos de gasto, ya sabes…”.

‘Debiste haber sido más discreta si querías comprar una isla…’. Yvette suspiró.

Nicole enarcó una ceja. “Estoy gastando el dinero de mi familia. ¿Eso qué tiene que ver con otros hombres?”.

“Sí, supongo que tienes razón. Después de todo, ni siquiera te gustan los hombres como Eric Ferguson…”.

Yvette frunció los labios y pareció preocupada por Nicole. "Bueno, si tienes alguna necesidad en el futuro, siempre puedes gastar dinero para conseguir los hombres más caros…”.

Nicole tosió y casi se atraganta con el sorbo de vino.

Miró a Yvette con los ojos en blanco y pensó: ‘Ella realmente piensa de mí de todas las maneras…’.

Yvette seguía pensando en algo. Frunció el ceño y dijo: “Por lo menos, tienes que encontrar a alguien más rico que Eric Ferguson. ¿Cuánto crees que vale Eric?”.

Nicole frunció los labios y resopló despreocupadamente y luego respondió: “¿Él? Nada".