La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2039

Resumo de Capítulo 2039 Admitiendo diligentemente su culpa: La Heredera Divorciada Billonaria

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Antes de que Nicole pudiera hablar, Tina rompió en llanto. Apretó los dientes y le hizo una oferta tentadora.

“No tengo amigos. ¡Si vienes y me acompañas, te venderé las acciones de la compañía de Zach que obtendré del divorcio!”.

Tina sabía que Nicole no tenía una amistad profunda con ella.

Nicole no vendría si Tina no le ofrecía algún beneficio.

Efectivamente, Nicole se levantó de la cama y se vistió mientras contestaba el teléfono con voz educada: “Qué tonta de tu parte. Como mujer, puedo entender cómo te sientes, de verdad…”.

Nicole no se vistió demasiado lujosa. Eligió un discreto vestido largo de color crema con un cárdigan fino que le combinaba y salió por la puerta.

Cuando llegó a la casa de Tina, se sorprendió al ver el estilo extravagante que era típico de un nuevo rico.

La casa estaba tan abarrotada que no había espacio para que ella caminara.

Nicole miró de cerca y vio montones de dinero en efectivo sobre la mesa.

También había muchas joyas de oro.

Tina le dio la bienvenida a Nicole. Tenía los ojos rojos y sollozaba. Ella no se había maquillado en los últimos dos días.

"¡Estás aquí! Toma asiento”.

Las comisuras de la boca de Nicole se torcieron. "¿Hay algo en lo que pueda ayudarte?".

Tina suspiró.

“No, solo quiero mirarte. Después de todo, te admiro mucho de todas en el círculo”.

Nicole no se atrevió a considerar eso como un cumplido.

Ella sonrió incómodamente.

“Tina, ¿has hablado de esto con Zach? ¿Decidiste divorciarte?”.

Tina frunció los labios, fue al baño a lavarse la cara y salió sin maquillaje.

“No, él no está de acuerdo con el divorcio, por lo tanto, planeo demandarlo”.

"De acuerdo. No esperaba que te divorciaras”.

“He estado cegada por el amor durante la mitad de mi vida. Ya es hora de que me despierte. Él se atrevió a humillarme en público. ¿De verdad pensó que me lo aguantaría? No te preocupes, te daré lo que te prometí. Pero no puedes bajar el precio deliberadamente. Ya que me voy a divorciar, tendré que gastar mucho dinero”.

Nicole levantó las cejas y asintió con comprensión.

"No te preocupes. Como mujer, no te trataré mal”.

Tina volvió al sofá y siguió empacando sus cosas.

“Todo esto es el efectivo y las joyas en casa, así como algunos contratos y acciones importantes. Necesito contar todo”.

Ella frunció el ceño, luciendo sombría.

“Sospecho que ese b*stardo ya comenzó a transferir nuestra propiedad. La mitad de nuestros activos contables desapareció y la compañía también está perdiendo dinero. ¡Pero mi gente en la compañía dice que la compañía ha estado operando bien últimamente y no hay pérdidas!”.

Nicole asintió. “Tienes que reunir algunas evidencias. De lo contrario, el divorcio será muy desfavorable para ti”.

Tina apretó los dientes con enojo. Sus ojos estaban rojos.

“Por supuesto, pero me temo que él ya haya transferido todas nuestras propiedades para el tiempo que nos divorciemos. No he estado al tanto de los asuntos de la compañía todos estos años, entonces Zach definitivamente tiene más peso en la compañía”.

Justo cuando estaba hablando, sonó el timbre.

Nicole miró a Tina. "¿Quién es?".

Tina ignoró el timbre y bajó la cabeza para seguir ordenando las cosas.

"¿Quién más podría ser? Él ha estado admitiendo diligentemente su culpa estos últimos dos días. ¿Piensa que todavía le creería?”.

El timbre sonaba sin parar.

Nicole se sorprendió de que Zach no tuviera las llaves de su casa.

O más bien, que Tina fuera rápida en cambiar la cerradura.

Nicole conversó con Tina mientras le enviaba un mensaje a Clayton sin problemas.

Tina estaba tan ocupada empacando que empezó a sudar. Sacó un par de fotos del dormitorio.

La expresión de Zach cambió dramáticamente. Rápidamente, él trató de explicarse.

Sin embargo, Tina no le dio la oportunidad. Su voz era ronca.

“Solo estás probando lo mínimo que puedo aceptar. No intentes negarlo. Ya no me tomas en serio. Por eso sacaste a otra mujer en público. ¡Ya no me respetas! No me llames Señora Gilbert. ¿Acaso no sabes que ya soy una broma para los demás? Rompiste el equilibrio entre nosotros al hacer esto. ¡Otros pueden reírse de mí, pero tú no!”.

Nicole cerró los ojos y se sintió sofocada.

Ella no debió haber venido.

Nicole y los demás pensaron que Tina se lo merecía.

Tina recibió una buena mano, pero aun así la arruinó.

Era lamentable y odioso.

Sin embargo, Tina terminó así no porque solo quería mantener el título de Señora Gilbert.

Tina y Zach se conocían desde la secundaria. Ese momento romántico fue suficiente para durar toda la vida.

"Esposa, me equivoqué...".

Zach no sabía qué decir, entonces solo podía disculparse.

Una disculpa despiadada y superficial no podía solucionar nada.

Solo haría que Tina estuviera más decidida.

“Zach Gilbert, me obligaste a estar en esta situación. ¡Definitivamente me voy a divorciar!”.

La expresión de Zach cambió, pero finalmente se fue.

El sonido de Tina cerrando la puerta de un solo golpe fue muy fuerte.

Ella se secó las lágrimas de la cara cuando regresó.

Sin embargo, sus ojos todavía estaban rojos.

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