La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2192

Resumo de Capítulo 2192 Agregando leña al fuego: La Heredera Divorciada Billonaria

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Las lágrimas de Nicole cayeron en algún momento y no podía escuchar una palabra de lo que dijo Eric.

Todo lo que sabía era que Eric permitió que los rescatistas se fueran y que ya no iban a buscar a Clayton.

¡Eric no podía esperar a que Clayton muriera!

A Nicole le dolía el corazón y su voz era casi histérica.

"¿Ayudarme? Me estás ayudando empujándome al infierno otra vez, ¿verdad? ¿No es esta tu especialidad? ¡Realmente no mejoraste después de todos estos años! ¡Solo quieres matarlo a propósito!”.

Eric se acercó a ella sin decir una palabra.

Podía sentir que ella estaba teniendo un colapso mental por haber mantenido sus emociones reprimidas todo el día.

Ahora no era el momento de razonar con ella.

Eric dio un paso adelante y cambió su tono.

“Está bien, admitiré lo que dijiste, entonces regresa conmigo primero. ¡No dejaré que estas personas se vayan y me aseguraré de que continúen la búsqueda al amanecer!”.

“¡No te creo! ¡No me engañes! ¡Cómo podría creer tus tonterías!”.

Por supuesto, Nicole se negaba a irse.

Ella tenía que quedarse aquí porque esa era la única forma en que podía estar segura de que salvarían a Clayton.

Eric frunció el ceño. Justo cuando estaba a punto de tocar sus hombros, ella lo empujó y se agachó debajo de él.

Su rostro se oscureció. Rápidamente, él dio un paso adelante, extendió las piernas e hizo que la mujer, que estaba a punto de escapar, tropezara.

Nicole solo estaba evitando sus manos y no esperaba que él la hiciera tropezar.

En ese momento, ella cayó de cabeza al suelo.

Inmediatamente, Eric la agarró del brazo y la atrajo a sus brazos.

Luego, él la arrastró a la fuerza hacia el coche y le ordenó al conductor con voz fría: "Conduce".

Su paciencia estaba agotada al ceder ante ella toda la noche.

Nicole luchaba por salir del coche y no podía mantenerse quieta.

“¡Quiero salir del coche! ¡Déjame ir! ¡No quiero tu ayuda! ¡Hipócrita!”.

Eric sacó una inyección de algún lugar y se la administró en el brazo.

Nicole lo miró en estado de conmoción.

Antes de que pudiera retirar la mano, el líquido interior ya había sido inyectado en su cuerpo.

Pronto, el coche finalmente se calmó.

Nicole se quedó dormida con lágrimas corriendo por su rostro.

El conductor miró hacia atrás y no se atrevía a decir nada.

Eric apoyó la cabeza de Nicole en su hombro y secó con cuidado las lágrimas de su rostro con un pañuelo, como si fuera algo muy importante, ya que lo hacía con mucho cuidado.

El conductor no se atrevía a mirar atrás y pensó: ‘La Señorita Stanton no está soltera. Sorprendentemente, el Señor Ferguson trata así a una mujer casada. Muchas celebridades quieren aventarse sobre él, pero él no se deja seducir en absoluto. Ni siquiera las mira. ¡Resulta que todavía está enamorado de su ex esposa!’.

Cuando llegaron a la villa, Eric se inclinó y cargó a Nicole hacia adentro.

La sirvienta aún no se había dormido. Cuando lo vio entrar por la puerta, se apresuró a saludarlo.

“¿La Señorita Stanton está dormida? ¿Está demasiado cansada? Prepararé el baño y la despertaré para que pueda tomar un buen baño y dormir profundamente más tarde”.

Eric subió las escaleras con grandes pasos.

"No es necesario. Solo usa una toalla y lávala superficialmente. Por cierto, ¿esa niña está dormida?”.

La sirvienta asintió con una sonrisa en su rostro.

"Sí. Esa niña es muy linda. Nunca había visto una chica tan adorable. Ella no hizo un escándalo y se fue a dormir cuando estaba cansada. Ella siguió llamando a su papá y a su mamá cuando se quedó dormida al principio, pero ahora está bien. Está profundamente dormida”.

Eric parecía solemne, pero no dijo nada. Sus ojos parpadearon cuando Eric puso a Nicole sobre la cama.

La sirvienta pensó que tenía que darles privacidad y se dio la vuelta para irse.

Sin embargo, Eric la detuvo.

"Espera un minuto. Deberías lavarla y cambiarle la ropa. Es inconveniente para mí”.

Si Nicole se enteraba de que Eric se aprovechó de ella mientras estaba inconsciente, podría querer matarlo.

Eric no tenía prisa. Tenía mucha paciencia.

La sirvienta se sorprendió y asintió rápidamente.

Eric salió de la habitación con la intención de bajar las escaleras, pero de repente pensó en algo y volvió a la habitación contigua.

Mitchell podía escuchar la voz reprimida y pesada de Eric.

Eric estaba bebiendo.

"Señor Ferguson, la Señorita Stanton probablemente necesita su ayuda en este momento”.

“Por supuesto, la acompañé todo el día a buscar su cuerpo. ¡Ella insistió en encontrar su cuerpo!”.

Eric estaba bebiendo, por lo tanto, Mitchell no sabía si solo estaba hablando de manera tan imprudente bajo la influencia del alcohol.

Mitchell suspiró.

"Señor Ferguson, si realmente se preocupa por ella, no debe apresurar las cosas. ¿Por qué se esfuerza tanto? Si es demasiado deliberado, la Señorita Stanton malinterpretará sus intenciones. Es bueno brindarle ayuda en su momento de necesidad, pero también debe tener cuidado con el tiempo perfecto. Puede ayudarla, pero... No haga nada drástico. Considere esto como si estuviera ayudando a un amigo”.

Mitchell estaba realmente preocupado de que Eric hiciera algo que no debería haber hecho en un momento de delirio.

Si realmente hacía algo, especialmente mientras Nicole estaba de duelo, su acto de ayuda se convertiría en echarle leña al fuego.

Para entonces, todos sus esfuerzos serían en vano.

Eric se quedó en silencio durante unos segundos antes de contarle a Mitchell.

“La hice tropezar y la traje a la fuerza mientras ella no prestaba atención”.

Mitchell jadeó.

Sin embargo, Eric no había terminado su oración.

Él continuó: “¡Ella no se comportó en el camino y siguió haciendo un escándalo para salir del coche, entonces la sedé!”.

Mitchell estaba completamente sin palabras.

Él se odiaba a sí mismo por contestar la llamada de Eric.

¿Eric se estaba ayudando a sí mismo?

¡No, Eric solo se estaba forzando a sí mismo a arrinconarse!

Eric habló de nuevo.

"Ella entenderá por qué hice eso cuando se calme, ¿verdad?".

Mitchell abrió la boca y dijo en voz baja: "Yo... No lo creo...".

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