La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2340

Los labios de Clayton se movieron ligeramente y sus ojos parpadearon. Él estaba a punto de decir algo cuando Nicole continuó hablando: “La dueña del bar fue muy comprensiva y llamó a alguien por mí, pero olvidé agregarte a mis contactos, entonces ella llamó a Malcolm. Afortunadamente, Malcolm no me decepcionó. ¡De lo contrario, me habría emborrachado por nada!”.

La voz de Nicole era suave. Ella estaba un poco borracha, entonces apoyó su cuerpo sobre el de él como una rosa suave y delicada.

El ruido de abajo era ensordecedor y también había un ruido ensordecedor proveniente de la sala privada detrás de ellos.

La pareja se abrazó brevemente.

Después de un momento de silencio, Clayton miró fijamente a Nicole. La punta de su nariz tocó la de ella, y el cálido aliento de cada uno cayó sobre la cara del otro mientras se acercaban.

El hermoso rostro del hombre, el cual parecía una obra de arte, era gentil y expresivo.

Había un destello en sus ojos profundos.

Clayton besó suavemente los deliciosos labios de Nicole y se demoró sobre ella. Su voz era profunda y ronca mientras decía: "Cariño, Chatty me dijo su deseo ayer".

Nicole inclinó su cabeza. "¿Qué deseo?".

“Ella dijo que quiere un hermano menor”.

Después de que el hombre terminó de hablar, inmediatamente la besó. Por alguna razón, sus cálidos labios de repente se volvieron abrasadores. Dondequiera que él la besaba, Nicole sentía que le ardía la piel.

Alguien en la distancia vio esta escena y silbó como un lobo.

Nicole estaba un poco avergonzada y se escondió en los brazos de Clayton mientras se sentía entumecida.

No muy lejos, en la sala privada más recóndita, un hombre serio estaba parado allí. Nadie sabía cuánto tiempo había estado mirando a la pareja. El hombre todavía tenía una mirada fuerte y feroz, y sus ojos eran oscuros y turbulentos.

El cigarrillo en su mano ya se había apagado.

Keith, quien salió de la sala privada, palmeó al hombre en el hombro.

“Ferg, has estado fumando durante mucho tiempo. ¿Por qué no entras?”.

Mientras hablaba, trató de arrastrar a Eric, pero Eric no se movía.

Keith siguió su línea de visión y se sorprendió.

Si fuera un extraño, Keith simplemente se reiría, pero reconoció el bastón que Clayton llevaba con él durante la entrevista.

Era difícil no recordarlo.

Keith hizo una pausa y vio las venas abultadas en el dorso de las manos de Eric. Keith no sabía lo que Eric estaba pensando.

Él arrastró a Eric a la sala y dijo: “¿No te estás atormentando a ti mismo? Él ha vuelto, entonces es normal que tengan intimidad. Si quieres, puedo quejarme con la dueña del bar para que vigile tales demostraciones públicas de intimidad en el futuro”.

Eric lo miró con indiferencia y se sentó dentro de la cabina.

Él apoyó los codos sobre las piernas, luciendo abatido.

"Olvídalo. Si ella está feliz, yo también lo estoy”.

Eric presionó el espacio entre sus cejas para ocultar su frustración y tristeza.

Keith sacudió la cabeza. “Por cierto, ¿qué le pasó a tu madre?”.

Eric levantó tus cejas. “Ella insiste en regresar diciendo que se siente incómoda viviendo en el extranjero”.

“Supongo que simplemente se siente sola. ¿Por qué no la envías para que esté con tu padre?”.

Los ojos de Eric se volvieron fríos.

“Los dos se separaron hace mucho tiempo. No se divorciaron porque mi abuelo no se los permitió, y ahora no hay necesidad de divorciarse”.

Keith abrió la boca pero no habló.

Estaba a punto de enterarse de los secretos de la familia Ferguson y se preguntaba por qué Eric decía esas cosas con tanta indiferencia.

Keith sonrió y le entregó un nuevo cigarrillo.

“Es bueno que ella haya regresado. Al menos, tendrás a alguien esperándote cuando llegues a casa. De todos modos, no tienes un conflicto con ella ahora, por lo tanto, también es una situación en la que todos ganan si la dejas cuidar a tu hijo, ¿verdad?”.

Las comisuras de la boca de Eric se torcieron. Él estaba frío y desolado, y no emitía ningún sonido.

Aunque Quinn dijo que extrañaba a su nieto, Eric sabía que no era una simple anciana que se quedaría en casa para cuidar a sus nietos.

Quinn solo quería aprovechar la situación para regresar a Atlanta y luego, poco a poco, encontrar una oportunidad para recuperar a Ingrid.

Eric miró a Keith con indiferencia. La ceniza del cigarrillo cayó sobre su mano, pero permaneció indiferente.

“¿Cómo se corteja a una mujer? Solo cortejé a una mujer en mi vida, pero fracasé. Tuve varias oportunidades, pero fracasé por completo”.

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