La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 2518

Resumo de Capítulo 2518 Casi ha llegado a su fin: La Heredera Divorciada Billonaria

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El rostro de Cindy gradualmente se puso rígido.

"¡Selena!".

Selena sonrió lentamente. Sus sienes se relajaron ligeramente.

“¿Te atreves a difundir esta grabación? No tienes miedo de lastimarme. Tienes miedo de las represalias de Eric y Nicole, ¿verdad?”.

De repente, la expresión de Cindy cambió.

Ella miró a Selena con fiereza.

Selena era mucho más inteligente de lo que ella pensaba.

“¿Qué beneficio puedo obtener al ayudarte? Eric me matará y tú no eres el tipo de persona que pagará la amabilidad de uno. Si ese es el caso, me encontraría con un callejón sin salida. Señorita Yeager, tienes razón. Estuve casada una vez, así que debería ser más sensata que los demás. Una persona sabia no se enamora. Ya que estoy con Eric, ¿cuál es el punto de hablar de sentimientos? Lo mejor es pensar solo en el dinero. Ahora yo tengo su tarjeta de crédito. Será un desperdicio si no lo gasto”.

Después de que Selena terminó de hablar, dejó escapar un largo suspiro de alivio y se puso de pie.

Ella miró a Cindy, quien estaba pálida, y sonrió.

"Señorita Yeager, déjame enseñarte un camino que puede hacer que él muestre misericordia”.

Cindy levantó los ojos, los cuales estaban llenos de lágrimas.

Sin embargo, todavía no quería admitir la derrota.

Selena dijo: “Ríndete. Utiliza tu libertad a cambio de la seguridad de la Corporación Yeager. Creo que él será indulgente. Él no es una mala persona”.

Cindy estaba sorprendida. "¿Por qué debería…?".

Antes de que terminara de hablar, de repente pensó en algo y miró a Selena con incredulidad.

"Tú… Él…".

Si Selena lo sabía, Eric también debía saberlo.

Resultaba que Eric ya sabía que Cindy estaba involucrada en ese accidente de coche.

De repente, Cindy sintió escalofríos corriendo por su espalda.

Su cuerpo temblaba involuntariamente.

Selena salió sin decir una palabra.

Ella se paró en la puerta. El sol brillaba cálidamente sobre su cuerpo y la envolvía en un suave abrazo.

Sin embargo, Selena perdió el buen humor que tenía al principio cuando entró. Se sentía como si acabara de escapar de la bodega de hielo. Tenía tanto frío que ni siquiera el sol abrasador podía derretir su cuerpo congelado.

En el otro lado de la carretera estaba la Corporación Ferguson. El edificio de gran altura se dirigía hacia el cielo.

En ese momento, el bosque de cemento que la envolvía la hizo sentir un frío sofocante.

Selena quería darse la vuelta e irse. Quería regresar a su bar y a la habitación que realmente le pertenecía.

Ella no tenía derecho a preguntarle a Eric por qué dijo eso, y mucho menos preguntarle si la quería un poco.

Ella no tendría dignidad si lo hacía.

Por lo tanto, no podía hacerlo.

Selena respiró profundamente. La pesada carga sobre su pecho podía matarla.

Sin dudarlo, ella se dio la vuelta, tomó un taxi y se fue.

En su estado actual, ella no podía ni quería conducir.

De vuelta al bar, era la hora del almuerzo, por lo tanto, Chaz estaba comiendo comida empacada con los trabajadores.

Todos estaban usando cascos protectores mientras hablaban, reían y comían.

Chaz no estaba tan limpio como de costumbre. Él estaba sentado en los escalones con un periódico viejo debajo de él mientras devoraba su almuerzo.

No levantó la cabeza hasta que Selena se acercó.

Él sonrió emocionado.

"¡Ay dios mío! El Señor Ferguson realmente está dispuesto a gastar dinero en ti. ¡Te compró un vestido de seis cifras así como si nada! ¡Jefa, no me olvides cuando seas rica!”.

Selena no pudo evitar reírse.

“Realmente debería darte un aumento. Eres el gerente, pero tienes que sentarte aquí y almorzar. Qué lamentable".

Chaz dijo emocionado: “¡Por supuesto que debes darme un aumento! No puedo comer este almuerzo por nada”.

Selena suspiró.

“No puedo darte un aumento… Tenemos que ponernos las pilas y vivir con lo que tenemos. Mi billetera estará vacía después de que termine la remodelación”.

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