Noah miró a Aida, entrecerrando los ojos con un poco de desdén y obscenidad.
Él señaló a Aida.
“¡Ja! Ya ni siquiera me llamas Tío Noah, ¿eh? Aida, déjame ver cuánto tiempo puedes fingir. ¿De verdad sientes lástima por ella? Tu familia también ha caído de la gloria. Si no fuera por Grant, hubieras terminado siendo la amante de otra persona. ¿Cómo te atreves a darte aires frente a mí solo porque has dado a luz a dos hijos para Grant?”.
Aida estaba tan furiosa que su cara se puso roja. Ella apretó los puños y abofeteó a Noah.
El rostro de Noah era frío y sombrío.
"¡¿Cómo te atreves a pegarme?!".
“¿Por qué no me atrevería? Dijiste un sinnúmero de basura. ¡Incluso si Papá y Grant estuvieran aquí, de igual manera me atrevería a pegarte!”.
El rostro de Aida estaba frío. Sus ojos eran desdeñosos y distantes.
Ya no había necesidad de ocultar su disgusto hacia este tío.
Aida estaba muy complacida por haberle pegado a Noah.
Justo cuando Noah estaba a punto de contraatacar, Selena jadeó y se sentó en el sofá con dificultad.
"Señor Stanton, por favor llama al doctor por mí. ¿Acaso no estás cooperando con mi esposo? ¿Cómo puedes verme morir?”.
Selena quería escuchar a Noah decir lo que pensaba.
Noah hizo una pausa, se calmó y se burló.
“Sin antihistamínicos, una reacción alérgica debería tomar alrededor de media hora para asfixiar a una persona y causarle la muerte, ¿verdad?”.
Había un poco de frialdad y alegría en sus ojos.
Aida se sorprendió por esa mirada psicótica en sus ojos.
De repente, Aida quería salir corriendo de la habitación, pero Noah la agarró del brazo con fuerza, la jaló hacia atrás y la arrojó junto a Selena.
“Ya que estás aquí, no tienes por qué irte. Me desharé de ti después de que termine con Selena”.
Él sonrió maliciosamente. Sus ojos cayeron sobre Selena de nuevo.
“En realidad, no planeo lastimarte. Pero, ¿por qué tuviste que casarte con Eric Ferguson?”.
Selena abrió mucho los ojos.
"¡Sabía que fuiste tú! Fuiste tú quien le pidió a Jennifer Nelson que me secuestrara en mi boda, y fuiste tú quien agregó polen a la bebida, ¿verdad?”.
Noah no pudo evitar levantar la cabeza y reírse a carcajadas.
“Tú te lo buscaste, así que no puedes culparme. El Señor Ferguson me dijo sobre tu alergia al polen, así que puedes culparlo a él. Debería agradecerle por esto. De lo contrario, sería muy difícil matarte en Mediania. Bueno, ahora, después de media hora, saldré y diré que comiste polen por error y moriste. No tiene nada que ver con nadie. En cuanto a ti…".
La mirada de Noah se posó en el rostro de Aida.
Había un poco de intención asesina en sus ojos.
Él levantó la mano, queriendo tocar su rostro, pero Aida lo empujó.
Noah sonrió lentamente como si no tuviera prisa en tocarla.
Ante la muerte, Noah no pensaba que Aida fuera a ser tan fría y rígida.
Tarde o temprano, Aida se arrodillaría ante él y le rogaría que le perdonara la vida.
El rostro de Selena estaba pálido.
“Obligaste a mi madre biológica a suicidarse. Nunca pensé en ajustar cuentas contigo, e incluso no tenía la menor idea. ¿Cómo puedes hacer esto? ¿Por qué quieres matarme? No entiendo”.
Noah se burló y la miró fijamente.
“Entonces, lo sabes después de todo. Entonces, debes saber que soy tu padre biológico, ¿eh?”.
Los ojos de Aida se agrandaron por la sorpresa por un momento.
Selena estaba sentada allí con un rostro tenso y rígido. Se apretó el pecho y jadeó pesadamente.
Las lágrimas cayeron involuntariamente por su rostro.
“No puedes obtenerlo. Mi madre murió por tu culpa. La hiciste perder a su familia feliz, y lentamente la llevaste a un callejón sin salida. ¿Por qué tienes el descaro de ajustar cuentas con nosotras? Noah Stanton, deberías estar agradecido con mi madre por no plantar las semillas del odio en mi corazón. Es por eso que no ajusté cuentas contigo. ¡Tú eres el que merece morir! Pero has disfrutado de una vida tan bendecida durante más de 20 años. ¡¿Qué tan injusto es eso?!”.
En ese momento, Selena ya no se agarraba el pecho y había dejado de jadear. Su rostro ya no estaba rojo y ya no se veía débil.
Noah frunció el ceño y la miró.
"¿Cómo te recuperaste de repente?".
Después de que dijo eso, hubo una conmoción en la puerta.
Alguien seguía llamando a la puerta.
Se escuchó la voz de Grant.
“Aida, ¿estás ahí?”.
A Aida le dolían los ojos de repente y se puso de pie rápidamente.
"Grant…".
Tan pronto terminó de hablar, Noah la empujó violentamente sobre el sofá y la abofeteó.
"¡Será mejor que te comportes!".
El ruido en la puerta se hizo más fuerte.
Eric estaba impaciente y quería patear la puerta para abrirla.
"Selena...".
Selena gritó en voz alta: “Estoy bien. No moriré todavía”.
Ella miró a Noah con burla e indiferencia en sus ojos.
“Por supuesto que estoy bien. Eso es porque fingí la alergia al polen. Desde el momento en que bebí ese cóctel, supe que me querías matar porque me serviste esa bebida. También eras el único que sabía sobre mi alergia al polen”.
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