Resumo de Capítulo 311 Soy un patrocinador – Capítulo essencial de La Heredera Divorciada Billonaria por Internet
O capítulo Capítulo 311 Soy un patrocinador é um dos momentos mais intensos da obra La Heredera Divorciada Billonaria, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
El personal a un lado escuchó esto e intentó desesperadamente hacerle una señal a las actrices chismosas para que se callaran. Por desgracia, las dos actrices de poca monta estaban demasiado inmersas en su propio mundo para darse cuenta.
Nicole nunca tenía la costumbre de quedarse callada.
Ella dejó su teléfono, se puso de pie y se dio la vuelta, mirándolas fijamente con una mirada clara y fría.
Había un toque de indiferencia en su voz perezosa: “Soy la patrocinadora de este evento. Si tienen preguntas sobre el plan de asientos, pueden quejarse de ello…”.
De todos modos, la queja terminaría en Dominic Young. Nicole tenía mucha curiosidad por ver si estas dos de listas de cuarta categoría podrían continuar su carrera en el mundo del espectáculo.
Las dos aspirantes se quedaron sorprendidas cuando vieron que era Nicole. Cuando escucharon sus palabras, sus rostros se pusieron tensos por un momento.
Bajo la luz, sus rostros densamente empolvados se volvieron aún más pálidos.
Se levantaron asustadas desde varias filas de distancia. Sus voces sonaban nerviosas. “No, no... No queríamos decir eso. Simplemente no vimos que era usted, Señorita Stanton…”.
Nicole puso los ojos en blanco, se dio la vuelta y volvió a sentarse.
En un principio ella quería cambiar de asiento con alguien, pero ya que este estúpido asiento central podía provocar a tanta gente humilde, Nicole ya no tenía ganas de moverse.
Las dos aspirantes tenían la intención de acercarse y disculparse personalmente con Nicole, pero fueron detenidas antes de que pudieran llegar al frente.
"Por favor, regresen a sus asientos originales o se les pedirá que se vayan".
Mitchell las detuvo. Él era educado y moderado.
Nicole notó por el rabillo del ojo que la luz parecía atenuarse en su lado derecho, donde alguien había tomado asiento. También había un ligero aroma frío.
Inconscientemente levantó la vista e inmediatamente frunció el ceño cuando vio a Eric Ferguson.
"¿Por qué estás aquí?".
Su tono transmitía un disgusto inagotable.
El corazón de Eric se ensombreció, pero su rostro permanecía inexpresivo.
"También soy uno de los patrocinadores".
Su voz era indiferente y gentil, lo que hacía que otros inconscientemente estuvieran absorbidos.
Sin embargo, las palabras que salieron de su boca molestaron a Nicole.
‘Bah…’. Nicole se enfurruñó y le dio la espalda, tratándolo como si fuera invisible.
Nicole se dio la vuelta para mirarlo.
Los ojos oscuros y profundos de Eric estaban fijos en ella. Las emociones en su interior eran complejas y contenidas.
Nicole estaba a punto de descifrarlas cuando los ojos de Eric se volvieron completamente negros.
Los labios delgados de él se separaron levemente.
"Hoy te ves hermosa”.
Los ruidos de alrededor parecieron quedarse en silencio en un instante.
Esta era una frase muy común, pero cuando Eric la usó con Nicole, la atmósfera de repente se volvió extraña.
La multitud miró a Nicole para ver su reacción.
Nicole frunció ligeramente sus labios rojos.
"Señor Ferguson, resulta que, después de todo, no eres ciego”.
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