La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 338

Nicole se quedó allí, retiró la mano y le puso los ojos en blanco a Eric.

“¡Ja! ¿Invitado misterioso? Si hubiera sabido que la Corporación Ferguson está invirtiendo en este programa, no le habría dado a Niel esos cien millones”.

¡Qué desperdicio!

Eric levantó las cejas y bajó deliberadamente la voz como si le estuviera susurrando.

“Entonces haré que te lo devuelva”.

‘¡Quién quiere tu estúpido dinero!’, pensó Nicole.

Eric vio que ella lo ignoraba y tosió ligeramente.

“Todo esto está arreglado por el equipo del programa. No serás una aguafiestas solo por culpa de nuestra relación, ¿verdad?”.

Nicole lo miró con indiferencia.

Ella curvó los labios y dijo: “Lo siento, Señor Ferguson, ya no tienes influencia en mí. No seas tan presuntuoso para acercarte a mí, y no me molestes de ganar dinero… ¡Para patrocinar a los jóvenes galanes!”.

El rostro de Eric se puso ligeramente rígido. Las comisuras de sus labios se movieron y él dejó de hablarle.

Aunque estaba enojado por sus palabras, no tenía más remedio que soportarlo ya que fue él quien lo pidió en primer lugar.

Todos escuchaban mientras el director explicaba las reglas del juego, lo cual en realidad era mucho más seguro que el primer episodio.

El primer juego consistía en encontrar el mapa del tesoro.

El mapa del tesoro estaba escondido en una fábrica abandonada. Nicole pensaba que probablemente habían elegido este lugar para ahorrar en el alquiler.

Obviamente, Eric estaba un poco disgustado, pero como este lugar fue elegido hace mucho tiempo, no se podía cambiar.

La fábrica se había limpiado, pero seguía estando lúgubre y algo inquietante.

Las paredes de color blanco grisáceo tenían un aspecto ruinoso. Había mesas y sillas esparcidas por todas partes, y el viento hacía volar algunas cortinas viejas. Parecía una casa embrujada.

Esta fábrica tenía tres pisos. Cada equipo elegía un piso y tenían que mantenerse unidos cuando cambiaran de piso más tarde.

Nathaniel y Fabian eligieron el primer piso.

Nicole y Eric eligieron el segundo piso.

Miles y Mikayla eligieron el tercer piso.

Cuando subieron, Nicole y Eric caminaban detrás de Mikayla y Miles.

El ambiente era bastante aterrador, con algunos lugares oscuros y húmedos donde no llegaba el sol, creando algunas zonas de sombra.

Mikayla se estremeció y siguió a Miles. Se mostraba muy asustada, débil y patética.

“¡Qué miedo! Nicole, ¿no tienes miedo?”.

“¡Ayuda!”.

Eric frunció el ceño. Si hubiera esquivado, Mikayla habría rodado por las escaleras.

En un instante, Eric no dudó en patear a Mikayla en la espalda para salvarle la vida.

Mikayla pasó de estar a punto de caer por las escaleras de espaldas a estar tirada boca arriba en el suelo, gimiendo de dolor.

Ese grito miserable volvió a atraer la atención de todos.

Mikayla pensaba que Eric vendría a rescatarla y quería aumentar sus posibilidades de contacto con Eric.

Como resultado, ella solo fue pateada en la espalda.

No hacía falta decir que su pequeño vestido de cóctel se había arruinado.

Nicole y Miles se apresuraron a acercarse cuando escucharon su grito. Nicole se veía sorprendida y se apresuró a ayudarla a levantarse.

“¿Estás bien?”.

Nathaniel había estado escuchando la respuesta atea de Nicole y vio todo con claridad desde el piso de abajo. En este momento, él no pudo evitar reírse a carcajadas.

“Mikayla, es una escalera muy ancha, pero casualmente caíste encima de mi tío, ¿eh?”.