La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 37

Después de eso, Eric Ferguson se levantó y se fue, dejando atrás a Colton White con su cara pálida.

Keith Ludwig persiguió a Eric. ‘Esto debe estar relacionado con Nicole otra vez. Esa mujer es realmente problemática’.

“Ferg, ¿por qué estás tan molesto? Todos somos hermanos. Sabes que Colton siempre ha sido directo. No te tomes tan en serio lo que dijo”.

Eric también sabía que había reaccionado exageradamente, y no esperaba perder el control de sus emociones de esa manera. Pero que cuando se enteró de estas cosas que debería haber sabido, pero le ocultaron, su único pensamiento fue: '¿Es por esto por lo que Nicole me odia?'.

Sentía su pecho apretado e incómodo.

Él se quedó en la entrada por un rato. Después de relajarse al sentir el frío viento, su mente se sintió mucho más clara. Sacó un cigarrillo y lo encendió. “Lo sé. Solo dile que no estoy enojado con él”.

'¡Solo estoy enojado conmigo mismo!', pensó Eric.

Keith dio un suspiro de alivio. “Está bien, pero no estás anhelando a esa mujer, ¿verdad?”.

Eric lo miró de reojo y resopló. Él no se molestó en responder la pregunta de Keith. “Tu restaurante no se compara con este nuevo lugar. Te recomiendo que cierres tu negocio...”.

El rostro de Keith se enrojeció de ira. “¡¿Acaso no eres mi hermano, cómo puedes decir eso?!”.

...

La Corporación J&L invitó a muchos miembros de la alta sociedad, empresarios y políticos para su aniversario. Todos los que asistieron al banquete eran de la élite.

Nicole había hecho su investigación. La Corporación J&L era una empresa relativamente nueva, que no contaba con muchos aliados, por lo que no debió haber sido tarea fácil lograr tal reputación, y desarrollarse a esta escala en unos pocos años.

El enfoque del departamento de investigación y desarrollo de la Corporación J&L era integrar tecnología e inteligencia artificial en la vida cotidiana. Ya habían dominado tecnologías básicas que estaban fuera del alcance de muchos países.

Nicole pensó: ‘Si puedo lograr conseguir este proyecto de inteligencia artificial, la Corporación Stanton podrá convertirse en pionera en este nuevo campo’.

Por lo tanto, Nicole vino preparada esta vez.

Todos estaban en el salón intercambiando cumplidos, cuando hubo un repentino grito de sorpresa. La multitud miró hacia donde se escuchó el sonido, y vio a una pareja parada en la entrada del salón de banquetes.

Todos conocían al hombre: Grant Stanton de Corporación Stanton. Él era despiadado, obstinado, y temido por muchos.

La mujer a su lado tenía un maquillaje exquisito, que resaltaba sus impresionantes rasgos. Su largo cabello ondulado estaba sujetado hacia atrás. Bajo su apariencia gentil, había una majestuosidad oculta.

Ella lucía un vestido a la medida, cosido a mano, con incrustaciones de brocas de diamantes que acentuaban su esbelta cintura. Su vestido resplandecía cuando se paraba bajo la luz, lo que la hacía brillar de forma muy intensa. Su porte elegante y su temperamento extraordinario hicieron que la multitud se maravillara ante su presencia.

Algunas personas también la reconocieron. ‘¿No es ella la ex esposa de Eric Ferguson? Debe estar ciego para querer divorciarse de una mujer tan impresionante...’.

La gente se acercó para saludarlos. “Señor Stanton, su acompañante de hoy es una verdadera sensación...”.

¿Quién hubiera sabido que el vestido que ella quería sería usado por Nicole?

'¿Qué está pasando?', pensó Ingrid.

Nicole solía ser conservadora y fea cuando estaba con los Ferguson. Ella solo sabía cómo hacer las tareas de la casa, y ni siquiera se atrevía a pronunciar una palabra en protesta. Nicole era tan humilde como una sirvienta, pero esta mujer frente a Ingrid era orgullosa, segura y tenía un aura tan impresionante. ¡Era como una persona completamente diferente!

Si no fuera por la inoportuna ocasión, Ingrid habría subido a decirles a todos que Nicole no era más que una mujer fea y anticuada, que había sido abandonada por la familia Ferguson. ¡Ingrid quería quitarle la máscara de confianza que tenía, y dejar que todos vieran lo patética y miserable que era Nicole en realidad!

“¿Que qué está pasando? Ingrid, ¿Nicole es realmente tu cuñada? Ella no es fea...”.

“¡Sí, ella es muy bonita! ¿No la ves? ¡Su piel está resplandeciente! Me pregunto dónde se hace sus tratamientos faciales...”.

“¿Ustedes chicas vieron al hombre a su lado? ¡Es tan guapo y considerado! Acabo de notar que tu hermano también la estaba mirando...”.

...

Ingrid cerró los párpados para reprimir los celos que se gestaban en sus ojos, bajó de golpe el vaso a un lado y resopló fríamente.

“La echaron de mi casa, así que ¿qué otra cosa puede hacer excepto tratar de conquistarse a otros hombres? Estoy segura de que ella es solo una interesada, intentando encontrar un viejo rico para no tener que preocuparse de por vida...”.