Resumo de Capítulo 436 Irás también – Uma virada em La Heredera Divorciada Billonaria de Internet
Capítulo 436 Irás también mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de La Heredera Divorciada Billonaria, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Romance, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
Nicole terminó su llamada telefónica, abrió su computadora portátil y revisó sus correos electrónicos.
Había muchos documentos de los que encargarse todos los días. Logan filtraba los importantes para ella en el buzón y se ocupaba del resto en su nombre.
Nicole le envió a Logan un mensaje recordándole algunas cosas más urgentes, entre ellas el proyecto de la Corporación J&L. No confiaba en que Tucker pudiera encargarse de todo.
Mientras Nicole estaba ocupada con el trabajo, Tigger saltó a su regazo. Levantó la cabeza con sus patitas delanteras, luciendo extremadamente adorable.
“Mamá, extraño a Papá…”.
Nicole, quien estaba a punto de abrazar a Tigger, se congeló y lo miró fijamente.
“¡¿Por qué siquiera lo extrañas?!”.
Tigger movió sus bigotes.
“Es mi configuración de interacción emocional que diseñó Molly Stewart. Necesito pensar en Mamá y Papá diez veces al día para cultivar sentimientos profundos…”.
Nicole soltó una risa ligera. ‘Incluso los sentimientos se pueden controlar con la Inteligencia Artificial, ¿eh?’.
Ella acarició su pequeña cabeza. “Entonces, ¿por qué no piensas en otros? Por ejemplo, en Kai y en mi padre”.
Kai escuchó esto y movió la cola. Habló con orgullo.
“El Abuelo dice que soy el niño más educado de la familia Stanton, ¡mucho mejor que ese mocoso de Kai!”.
Nicole no podía evitar reírse. Floyd siempre insultaba a Kai delante de Tigger.
Mientras charlaba con Tigger, ella se puso a trabajar y empezó a hacer la maleta.
La ligera lluvia duró toda la noche y el cielo se despejó a la mañana siguiente. Incluso el aire olía dulce. La luz del sol a través de la cortina de gasa dejaba un resplandor dorado en la habitación.
Como Nicole no tenía que ir a trabajar, tenía un horario flexible y se despertó naturalmente.
Cuando Nicole abrió los ojos, ya eran más de las nueve de la mañana.
Poco a poco se fue refrescando, se vistió y se maquilló un poco. No había mensajes en su teléfono. Nicole se acordó de repente de que la noche anterior no había fijado una hora con Eric ni con su padre.
Por lo tanto, Nicole holgazaneaba, se sentó en el balcón a meditar y relajó su cuerpo.
Cuando salió de su habitación, ya eran las once de la mañana.
En cuanto llegó a las escaleras, podía oír voces procedentes de la planta baja.
Floyd dijo: “La Pequeña N estuvo ocupada con el trabajo hasta la medianoche y se levantó temprano esta mañana para una reunión. Ah… Ella realmente trabaja tan duro…”.
Floyd estaba muy satisfecho con su respuesta. Nicole podía engañar a cualquiera con facilidad.
“¡Buenos días, Señorita Stanton!”. Sorprendentemente, Toto estaba allí.
Nicole asintió a modo de saludo.
El Pequeño Michael estaba sentado obedientemente junto a Clayton. Se veía menos enérgico, como si hubiera sido regañado de antemano.
En cuanto el Pequeño Michael vio a Nicole, sus ojos se iluminaron. Miró a su padre y mantuvo el trasero pegado al sofá mientras sentía un poco de pesadez en el pecho.
Eric miró al Patek Philippe que llevaba en la muñeca y dijo: “Ya era hora. Vamos”.
El Pequeño Michael se levantó de golpe. “¡Bueno! ¡Vamos! ¡Sí! ¡Me voy de viaje con mi señorita bonita!”.
La cara de Eric se puso ligeramente rígida. “¿Tú también irás?”.
“¡Sí!”.
Eric miró al niño de forma incrédula. “¿Cómo puede el Señor Sloan sentirse seguro de que irás solo?”.
Clayton frunció el ceño y dijo con indiferencia: “Cierto, no me siento seguro de que él vaya solo, así que lo acompañaré”.
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