La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 460

Nicole miró hacia atrás, se acercó con indiferencia y agarró la bufanda de seda de las manos de los dos hombres.

Ella rompió el silencio en el aire.

"Vámonos. Estamos tarde".

Nicole se sentó en el coche después de tomar la iniciativa de hablar.

Clayton se puso de pie y miró a Eric con frialdad. “Adiós, Señor Ferguson”.

Él escudriñó a Eric mientras pasaba por alto su opresivo escalofrío. Luego, él caminó por la parte delantera del coche, entró y encendió el motor.

Eric se quedó allí sentado, inmóvil. Sus ojos se entrecerraron aguda y peligrosamente.

¿Cómo podía seguir siendo indiferente cuando alguien más quería quitarle algo?

Toto bajó y vio a Eric sentado solo en la entrada principal, por lo cual se acercó apresuradamente.

"Señor Ferguson, ¿ha visto a la Señorita Stanton?”.

Eric no dijo nada.

Después de mucho tiempo, él habló con indiferencia: "Ve y mira qué fiesta hay en el círculo hoy".

La fiesta a la que Clayton y Nicole asistieron juntos no sería una pequeña fiesta desconocida.

No había forma de que Eric no pudiera averiguarlo.

Toto se congeló por un momento y sacó su teléfono para revisar el horario que Mitchell le había enviado.

Unos segundos después, Toto habló con dificultad. "Es la fiesta de cumpleaños del Joven Amo Ludwig. Rechazó su invitación...".

Eric frunció el ceño mientras Toto continuaba hablando.

“Escuché que el Joven Amo Ludwig invitó a muchas celebridades. Es un gran banquete. ¿Quiere ir a echarle un vistazo?”.

Toto no tenía esperanzas porque sabía que Eric no perdería su tiempo en este tipo de fiesta sin valor.

Eric hizo una pausa por un momento. "Está bien. Ve y organízalo".

Toto se sorprendió por un momento. Él no se atrevió a demorarse ni un momento más e inmediatamente le pidió al conductor que viniera.

En el camino, Toto quería preguntar dónde estaba Nicole, pero no se atrevió a hablar.

Pronto, ellos llegaron a una villa de lujo junto a la playa.

La risa dentro de la villa se podía escuchar desde la distancia.

Cuando Keith se enteró de que Eric llegó, él corrió emocionado hacia la puerta para saludarlo personalmente.

Una vez que vio a Eric, Keith se emocionó mucho y le dio un enorme abrazo de oso.

Keith miró a Eric con agravio y dijo con voz temblorosa: "¡Realmente no viniste por mí!".

Su mirada de lástima lo hacía parecer como una esposa celosa.

Al ver que Eric estaba a punto de estar rodeado de otros invitados que querían intercambiar cumplidos, Toto se apresuró a empujar a Eric al interior.

“¡Joven Amo Ludwig, el Señor Ferguson vino especialmente por usted! Deliberadamente se tomó un tiempo de su apretada agenda para desearle un feliz cumpleaños. Encontrarse con la Señorita Stanton es pura coincidencia... ¡No, es el destino!".

Toto cambió de tono y miró a Nicole.

"¡Definitivamente es el destino!".

Nicole puso los ojos en blanco y se acercó.

"¿Ya terminaste?".

Todo el mundo lo oiría si Toto continuaba con su charla.

El estado de ánimo de Eric estaba, obviamente, mucho mejor cuando vio a Nicole parada allí sola.

La frialdad en sus ojos se desvaneció mientras la miraba gentilmente, incapaz de apartar la mirada.

"Mm, el destino".

Cuando Keith escuchó eso, se acercó a Eric. "¿De verdad viniste especialmente por mí?".