La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 607

Charlotte dijo: “Señorita Stanton... usted…”.

Nicole explicó de inmediato: “Eric Ferguson no está en esta habitación. ¡Esta es mi habitación! ¡Si no me crees, puedes entrar y ver!”.

Charlotte bajó la mirada y recogió su expresión perdida y nerviosa.

Ella luchó para poner una sonrisa. “No... No es necesario, yo…”.

Charlotte no parecía pensar en ninguna excusa para venir a ver a un hombre vestida así.

¡Además, ese hombre también era el ex esposo de Nicole!

La vergüenza y el pánico de repente hicieron que Charlotte se quedara sin palabras. Sus dedos apretaron la botella de vino con fuerza mientras se mordía el labio inferior. Su rostro estaba tan rojo como una manzana.

Esta sutil tensión le resultó insoportable a Charlotte.

Nicole miró a Charlotte y pensó que no debería ser parcial con Sadie, por lo que le propuso de manera considerada.

“¡Te ayudaré a contactar al Señor Ferguson para que puedas hablar con él en persona!”.

Como ex esposa, el entusiasmo y la generosidad de Nicole fueron verdaderamente admirables.

Antes de que Nicole pudiera sacar su teléfono, Charlotte dio un paso atrás en estado de shock. “No es necesario, Señorita Stanton. De repente recordé que aún no he memorizado mis líneas para mañana, así que me iré. No la molestaré más. ¡Qué tenga buenas noches!".

Después de eso, Charlotte se dio la vuelta para irse, pero cuando se dio cuenta de lo que sostenía, se volteó y se lo entregó a Nicole.

“Este es mi vino casero, lo hice usando la receta de mi familia. Puede probarlo…”.

Antes de que Nicole pudiera darle las gracias, Charlotte se alejó corriendo.

La forma en que corrió Charlotte fue aún más cómica que la de Sadie hace un momento.

Nicole no pudo evitar reírse cuando miró la botella de vino y dos copas de vino en sus manos.

Parecía que incluso si Eric Ferguson estaba divorciado, todavía era muy atractivo ya que una multitud de mujeres se abalanzaba sobre él.

Si Eric no estuviera divorciado, habría aún más, ¿verdad?

Los ojos de Nicole se volvieron fríos. Cuando estaban casados, Nicole no tenía derecho a preocuparse por cuántas mujeres había alrededor de Eric.

Ni hablar de ahora que estaban divorciados.

Nicole tomó el vino y se sirvió tranquilamente una copa.

Ella bebió un pequeño sorbo. La rica fragancia llenó la cavidad de su nariz mientras que los suaves y complejos sabores se extendieron por su boca a la vez. Era intenso, y su maravilloso sabor perduró en su lengua.

“¡No creo que le agregue algo al vino, pero tiene un sabor fuerte!”.

Nicole se sintió un poco ebria, pero estaba adicta al vino y quería beber el resto.

Ante ese pensamiento, Nicole quiso tomarse el resto del vino de la botella.

Cuando Nicole vertió el vino en la copa, ya tenía visión doble, pero aun así logró verterlo con precisión.

“¡Hola, Pequeña N! Ya estás ebria después de unos sorbos. ¡¿Cómo no está drogado?!”.

Yvette se dio cuenta de que algo andaba mal y entró en pánico.

Sin embargo, Nicole la ignoró y bebió lentamente el vino.

Eso le dio una sensación agradable.

Yvette maldijo y tomó su teléfono. “Deberías estar agradecida de haber nacido en la Familia Stanton. ¡De lo contrario, no habrías vivido tanto tiempo y habrías sido asesinada hace mucho tiempo!”.

Yvette encontró el número de Eric y lo llamó de mala gana.

Aunque Nicole quería trazar una línea clara con Eric, en este momento, solo Eric Ferguson podía calmar a ese grupo de damas divorciadas que rondaban a su alrededor como lobas hambrientas.