La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 726

Eric temía que los demás no supieran que la publicación era para Nicole.

Nicole se quedó sin palabras y lo maldijo un millón de veces para sus adentros. ‘¡Este hijo de p*ta está loco! ¿No puede simplemente concentrarse en ser un buen jefe? ¿Qué sentido tiene que siempre esté pensando en ser un experto en la cocina? Además, ¿por qué siempre tiene que involucrarme en sus p*dejadas? ¡¿Qué demonios?!’.

Hubo todo tipo de elogios en los comentarios de la publicación de Eric.

[¡Señor Ferguson, los postres que hizo se ven increíbles!].

[¡Eso es impresionante! ¿Qué bendición sería probar la cocina del Señor Ferguson?].

[¡La sinceridad es la clave del éxito!].

…

Nicole gruñó. ‘¡Ja, ja! Si les doy esta “bendición”, ¿se atreverían a aceptarla?’.

Después de un rato, Keith finalmente no pudo evitar preguntar lo que estaba en la mente de todos.

[¡¿Realmente hiciste esto con tus propias manos?!].

No mucho después, Eric finalmente respondió.

[No, pero los probé yo mismo].

Al menos todavía había gente que no estaba dispuesta a mentir descaradamente.

La respuesta fue simple y concisa.

Todos se callaron finalmente.

Por la tarde, Nicole salió del trabajo.

La recepcionista la llamó.

“Presidenta, alguien le ha enviado un paquete”.

Nicole levantó las cejas. No recordaba haber pedido algo. Logan solía encargarse de sus paquetes.

Tras acercarse a echar un vistazo, Nicole vio una delicada cajita de comida.

La abrió y vio que estaba llena de postres.

La expresión de Nicole cambió drásticamente. ‘¡Maldita sea! ¡Ese molesto Eric Ferguson sigue persiguiéndome!’.

Ella sonrió y se lo devolvió a la recepcionista. “No has cenado, ¿verdad? Te los puedes quedar”.

La recepcionista se sintió halagada. ‘¡Dios mío! Estos postres estaban destinados a la Presidenta Nicole. ¡Ella es tan amable!’.

“¡Gracias, Presidenta!”.

Cuando Nicole se marchó, la recepcionista abrió la caja y vio que había una nota dentro.

Parecía muy extraño, sin importar cómo lo mirara.

Nicole puso los ojos en blanco. “Entonces… te deseo éxito en tu aprendizaje”.

Eric hizo una pausa. “Empecé a hacer las cosas que solías hacer para experimentar cómo te sentías en aquel entonces. Nicole, siento mucho haberte lastimado tanto”.

Hubo silencio en el teléfono durante unos segundos.

Luego, Nicole colgó la llamada.

No habían llegado al punto de poder hablar tranquilamente del pasado.

Ya era demasiado sin siquiera mencionar el pasado.

Eric miró la pantalla apagada y sintió con intensidad cada uno de los cambios de emoción de Nicole. Ella estaba evitando el tema porque estaba muy triste.

Esa tristeza era como cuchillos entrelazados que cortaban su cuerpo.

Todo esto era una retribución.

Toto salió de la cocina. Por fin había conseguido limpiar la costosa cocina y esperaba que Eric pudiera dejar su afición por la cocina.

En los últimos días, Eric había roto muchos juegos de vajilla de porcelana. También se estropearon innumerables aparatos de cocina gracias a él.

Eric era el destructor número uno en la cocina. ¡Era simplemente tóxico!