La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 890

Nicole tomó un sorbo de limonada y miró a Ava con una sonrisa.

“No puedo evitarlo. Mi vida es buena”.

Nicole se habría desquitado de Ava si fuera otra persona.

Cuando ella se despertaba, tenía que ser responsable del sustento de decenas de miles de personas bajo sus manos. No podía soportar ni siquiera comer si había la más mínima turbulencia en el mercado de valores.

‘También es difícil para mí como presidenta, ¿de acuerdo?’, pensó Nicole.

Ava se atragantó y sintió como si tuviera algodón atorado en la garganta.

Ella sonrió y sacó su teléfono. “¿Por qué no nos agregamos por WhatsApp? Estaremos en contacto…”.

Los ojos de Nicole brillaron y dudó una fracción de segundo antes de aceptar.

“Claro…”.

Ella realmente quería saber qué propósito tenía Ava para presentarse aquí.

Después de agregar el contacto de Nicole, Ava empujó su teléfono hacia Clayton y parpadeó con sus ojos seductores, sonriendo coquetamente.

“Vamos a agregarnos también”.

Clayton se negó amablemente. “No, no soy de usar redes sociales a menudo”.

Ava reposó la barbilla en su mano. Sus ojos se movieron ligeramente y parpadearon entre él y Nicole.

“¿Acaso es una excusa? ¿Qué clase de persona no utiliza las redes sociales? ¿Será que Nicole no te permite hablar con otras mujeres? ¿Cómo puede ser Nicole una persona tan mezquina?”.

Nicole sonrió y levantó las cejas. Miró a Clayton.

“Sí, solo agrégala. Podría ser útil…”.

Clayton tenía una expresión complicada. Era evidente que estaba reacio a hacerlo.

Sin embargo, ya que ella lo decía, no podía negarse. No tuvo más remedio que añadir el contacto de Ava.

Nicole le echó un vistazo a la pantalla de Clayton. Ava le envió inmediatamente un emoji de “corazón disparado”. Era muy bonito y adorable.

“Señorita Stanton, todavía hay muchos platillos por venir…”.

Nicole sonrió. “Mis colegas llegarán en un momento. Póngalos en el resto de los asientos. No tienes que servir a otros invitados este mediodía”.

El mesero asintió. “Entendido, Señorita Stanton”.

No mucho después, el mesero trajo el vino, y Ava se apresuró a tomarlo. “Permíteme…”.

Ella sonrió y sirvió una copa para Nicole.

“Realmente te envidio por tener un novio tan considerado y rico. ¿No son los ricos muy exigentes con el matrimonio? La familia de tu novio debe ser rica, ¿no? Estabas en la cúspide de tu vida tan pronto como naciste, y había un montón de hombres cortejándote. Puedes conseguir a cualquiera con solo un chasquido de dedos. En cuanto a mí, he estado luchando sola y sigo sin tener novio…”.

Ava miró a Clayton con sus ojos seductores y errantes. Le mostró una sonrisa brillante. De repente, su mano tembló.

El vino se derramó.

“Lo siento. Me descuidé. Deja que te ayude…”.

Ella rodeó la mesa y trató de ayudar a Clayton a limpiar su ropa manchada de vino.