La Heredera Divorciada Billonaria romance Capítulo 94

En el momento en que Wendy Quade vio a Yvette, su expresión cambió. ‘Si Yvette pudo venir, ¿significa que Nicole también estuvo aquí…? ¿No me equivoqué?’.

En un instante, Wendy apretó el puño y fijó la mirada en la mujer sentada de espaldas a ellos.

“¿Eres sorda? ¡Ven y toma fotos conmigo!”. A Ingrid le molestó que una modelo la ignorara.

Yvette se rio entre dientes y parecía que estaba lista para ver a Ingrid hacer el ridículo. “¿Quién diablos eres tú? ¿Por qué debería alguien escucharte?”.

Ingrid apretó los dientes. “¡Eso no tiene nada que ver contigo! ¡Métete en tus asuntos!”.

Miró a la modelo que seguía impasible. “¡Eh, tú! Soy la joven dama de la familia Ferguson. ¿Cuánto quieres para estar dispuesta a tomarte una foto conmigo?”.

‘¿Quien se cree que es?’, pensó Ingrid.

Ingrid solo quería presumir ante sus amigos. De lo contrario, no habría pedido una foto. En el pasado, Ingrid estaba acostumbrada a que otros la rodearan y le pidieran una foto.

Nicole levantó los ojos molesta. ¿No puedo tener un momento de paz?

“Joven dama de la familia Ferguson, ¿eh? No recuerdo haberte visto en la lista de invitados…”, Nicole finalmente habló y se dio la vuelta, lanzando una mirada fría y aguda a Ingrid y Wendy.

‘Deberían estar contando sus bendiciones porque no busque problema con ellas. ¿Incluso se atreven a tener problemas conmigo? ¡Realmente tienen un deseo de muerte!’.

Ingrid se sorprendió y dijo con incredulidad: “¡¿Tú... eres tú?!”.

‘¡¿Esa hermosa modelo es en realidad Nicole?! ¿Nicole incluso hizo la caminata de cierre de este codiciado desfile de moda? ¡¿Cómo está tan tranquila y deslumbrante?!’.

“Si, soy yo. ¿Hay algún problema?”. Nicole la miró con indiferencia.

El rostro de Ingrid estaba triste. Ya había sido humillada por Nicole hoy temprano, y ahora, ella estaba parada aquí enojándose con Nicole una vez más.

“¡Hmph! Deja de fingir ser elegante y de alta costura. Incluso si usas un vestido tan hermoso, ¡nunca podrás deshacerte de ese olor a pobreza en ti! ¡Creo que he tenido la maldición de verlos a ustedes dos donde quiera que vaya!”.

Ingrid ya no quería tomarse una foto con Nicole porque eso solo reduciría su estatus.

Yvette se rio exasperada. “¡Jajaja! ¡¿Estás diciendo que olemos a pobreza?!”.