La Heredera Revelada: El Camino del Poder romance Capítulo 155

—Hola, señor Marcano —saludó Liam con cortesía.

No podía sacudirse la sensación de haber visto a ese señor Marcano en algún lugar antes.

...

La noche en Puerto San Martín brillaba con luces deslumbrantes.

Aurora y Dante salieron del cine, mientras una brisa fresca aliviaba el calor sofocante del lugar.

—¿Qué te pareció la película? —preguntó Dante volteando hacia Aurora, su voz suave y cálida.

—No estuvo mal, los efectos fueron impresionantes —respondió Aurora mientras se estiraba.

Dante había reservado las entradas para la película, una nueva producción de ciencia ficción muy popular.

A ella no le llamaban mucho la atención las películas de ese género.

Ambos subieron a una SUV negra que estaba estacionada en la calle.

Marcelo ya los esperaba desde hacía rato.

Cuando los vio subir al carro, lo encendió y se adentró en el flujo del tráfico con suavidad.

Aurora sacó su celular y desbloqueó la pantalla, donde apareció un nuevo mensaje.

Era de Verónica.

Al abrir el mensaje, casi podía escuchar la voz ligeramente quejumbrosa de Verónica en su oído.

[Verónica: Amiga, estos días he estado de malas, casi me descubren esos viejos desgraciados. Apenas logré salir con vida.]

[Aurora: ¿No te dije que mantuvieras un perfil bajo? ¿Otra vez jugando con fuego?]

Verónica respondió al instante: [¡Me están difamando! Esta vez no fue mi culpa, ellos tienen el olfato demasiado agudo. Pero no te preocupes, tengo todo bajo control. Oye, ¿cómo va lo de la familia Gálvez de Nueva Granada? He estado tan ocupada huyendo que no he tenido tiempo de ver.]

Aurora contestó mientras deslizaba el dedo por la pantalla, sus dedos volaban sobre el teclado virtual: [Joel se prepara para heredar el Grupo Gálvez en cinco días, planeo darle un regalito ese día.]

—A veces juego para pasar el rato —dijo Aurora despreocupadamente, moviendo sus dedos por la pantalla para controlar al personaje del juego.

—Este juego se ve interesante —comentó Dante observando la pantalla.

—Sí, es un nuevo juego móvil de ‘LunaTek’, bastante entretenido —respondió Aurora sin notar la peculiaridad en el tono de Dante.

No estaba familiarizada con las compañías de juegos.

Solo pensaba que el juego tenía gráficos bonitos y era fluido al jugarlo.

Marcelo, que conducía al frente, no pudo evitar arquear una ceja ante las palabras de Aurora.

A través del espejo retrovisor, echó una mirada furtiva a Dante sentado atrás.

Su jefe mantenía una expresión serena, como si solo escuchara una conversación trivial.

Marcelo sonrió para sí mismo, pensando que el señor Dante era el epítome de la discreción.