La Heredera Revelada: El Camino del Poder romance Capítulo 178

Su voz era apasionada, como la de un hijo devoto dispuesto a sacrificarse por el negocio familiar.

Sin embargo, en lo profundo de sus ojos, brillaban la locura y la avaricia.

Había planeado este día durante mucho tiempo.

La sala de reuniones estaba en silencio, y todas las miradas estaban fijas en Joel, esperando su próximo movimiento.

El aire estaba cargado de una tensión extraña.

La calma antes de la tormenta a menudo resulta más asfixiante.

Mientras tanto, en el Aeropuerto Internacional de Nueva Granada, la multitud iba y venía en un bullicio constante.

Aurora, con gafas de sol y mascarilla, estaba sentada en un rincón de la sala de espera, sus dedos volando sobre la pantalla del celular.

El personaje del juego en la pantalla se movía como un espectro, cosechando las vidas de los enemigos.

Este juego, 'Expedición Interestelar', había recibido una actualización hace unos días, lo que lo había hecho más accesible.

El juego había añadido un módulo de interacción entre jugadores.

En ese momento, estaba en equipo con un amigo de juego que había agregado el día anterior.

El ID del juego del compañero era simplemente una letra 'F', y luchaba codo a codo con el "monosexy" de Aurora.

Ambos se coordinaban perfectamente, dejando al enemigo patas arriba.

F: [Bonito]

Al ver el mensaje en el juego, Aurora sonrió ligeramente, controlando a su personaje para realizar otra espectacular eliminación.

monosexy: [Es básico]

En la suite del Hotel Corona Dorada.

Dante, sentado en su silla de ruedas, sostenía el celular horizontalmente.

Al ver el mensaje en el juego, se quedó un momento perplejo, sin comprender del todo.

¿Es básico? ¿Qué significa?

Justo al terminar una partida, Aurora se frotó el cuello adolorido.

El celular vibró.

Aurora echó un vistazo al nuevo mensaje, era de Emilio: [señorita Lobos, ya llegué, en la salida A]

Aurora volvió a la interfaz del juego, tecleando rápidamente.

Una chispa de desagrado pasó por los ojos de Joel, pero pronto la disimuló.

Lo que él buscaba era el control, no discutir en vano con esos viejos.

—¿Por qué la prisa? El director Marcano aún no ha llegado.

Alguien recordó esto.

El viejo accionista, al recordar algo, volvió a sentarse.

Joel revisó nuevamente la hora, ya eran las tres y media.

Estaba a punto de mandar a Alberto a apresurar las cosas, cuando de repente, la puerta de la sala de reuniones se abrió de golpe.

La pesada puerta de madera chocó contra la pared, produciendo un fuerte estruendo.

Todos en la sala sintieron un temblor en el corazón.

Todas las miradas se dirigieron instantáneamente hacia la puerta.

Emilio entró, vestido con su traje negro.

Detrás de él, iba una persona cubierta de manera meticulosa.