La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 1109

Mark pudo ver a través de la determinación de Alejandro. Su corazón se hundió. “No puedo hacer eso. Jackson es mi mejor amigo. No me quedaré de brazos cruzados cuando se trata de él. Ya que ese es el caso, no me culpes. Te derrotaré con la aprobación de Arianne”.

La fiesta no había terminado, pero Jackson y Mark se fueron de todos modos. Le dieron a Janice y a la otra mujer algo de dinero, luego les dijeron que tomaran un taxi a casa por su cuenta.

Esta vez no fue un esfuerzo completamente inútil. Al menos, habían logrado confirmar que Alejandro era Ethan. Desafortunadamente, Alejandro había estado bien preparado, por lo que no pudieron obtener ninguna prueba sustancial para dar a conocer su identidad y enviarlo a la cárcel. Esta iba a ser una batalla larga y apenas estaba comenzando.

Jackson estaba en el colmo de su temperamento. “¿Qué diablos quiere? ¿Quiere quitarme a mi mujer? ¡Olvídalo!”.

Mark suspiró. “Él no hará nada hasta que Tiffany dé a luz. Deberías calmarte por ahora. Se está haciendo tarde. Deberías ir a casa. Intenta mantener en secreto la identidad de Alejandro como Ethan. No dejes que Tiffany se entere. Si realmente no puedes ocultárselo, improvisa. No pases por demasiados problemas”.

Jackson se apoyó en su coche y encendió un cigarrillo, sintiéndose decrépito después de estallar. “No creo que pueda ocultárselo más. Tiffie se dará cuenta. Ella siempre ha visto a Alejandro como un amigo. Quién sabe si se ha estado comunicando con él en secreto. Cada vez que recuerdo que Alejandro es Ethan, pierdo el control, pero no puedo decírselo... Tengo tanto miedo de que Alejandro se acerque a Tiffie de nuevo, tanto miedo…”.

Mark hizo una pausa y luego dijo: “Entonces tendremos que encontrar una manera de deshacernos de él. Aquí solo hay dos formas, siempre que sea Ethan: una, la muerte, dos, la prisión. Yo siempre estaré de tu lado. Mientras yo esté cerca, no te preocupes”.

A Arianne se le aceleró el corazón. Cogió el teléfono y miró la pantalla. Jackson estaba de pie con otra mujer. Aunque no se tocaban, la pareja estaba muy unida y parecía bastante íntima. Había otras personas cerca, también era una mujer, pero la cara no estaba en la toma. Según los antecedentes, parecería que estaban en una fiesta… ¿Podría ser la fiesta de esta noche?

“¿Quién te envió esto?”, preguntó vacilante.

Tiffany se mordió los labios. “Alejandro. Él también está ahí. Él lo vio, tomó una foto y me la envió. Yo no quería decírtelo al principio, ¡pero Mark también estaba con otra mujer! Alejandro me lo envió. Míralo por ti misma. No quiero, es repugnante”.