La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 1317

Alejandro se sentó en su silla y dijo sin expresión alguna: “El viejo me ha ordenado que no me aparte de tu lado. Además, es mejor que me quede, ya que tengo algo de paz y tranquilidad. Además, no tengo ganas de servirle de todos modos”.

Melanie bajó la cabeza y se quedó callada. Sabía que en realidad él no se sentía así. Sea cual sea la razón, en el momento en que Alejandro se dio cuenta de que Don Smith no le quedaba mucho más tiempo de vida, él había estado sirviendo a su lado constantemente. Incluso si Don Smith se enfurecía y arremetía contra él, Alejandro ni se quejaba ni tomaba represalias; ni siquiera podía cuidar su pierna. Melanie pensó que era una buena oportunidad para que se relajara.

También fue una bendición disfrazada para Melanie. ¿De qué otra manera Alejandro se quedaría voluntariamente a su lado en el hospital?

A la mañana siguiente, el médico le entregó los documentos de consentimiento para que Alejandro los firmara mientras Melanie se acostaba en su cama nerviosa. Ni siquiera había tenido una cicatriz en su vida, y mucho menos había entrado en un quirófano. Fue difícil para ella no estar aterrorizada a medida que se acercaba el momento. Sin embargo, Melanie no se atrevió a mostrarle a Alejandro sus miedos, pues temía que él la criticara. Ella era quien había tomado esta decisión, por lo que necesitaba llevarla a cabo sin importar nada.

Cuando los largos y delgados dedos de Alejandro agarraron el bolígrafo, se detuvo justo cuando estaba a punto de firmar los documentos de consentimiento. “Pareces aterrorizada. ¿Segura que quieres hacer esto? No hay vuelta atrás una vez que lo haya firmado”.

Melanie se quedó paralizada por un momento. “¿Quién dice que estoy aterrorizada? ¡Firma, no tengo miedo! ¡No retrases la cirugía!”.

Alejandro giró la cabeza para mirarla con una sonrisa y, en un instante, firmó los documentos de consentimiento en varias áreas requeridas.

Melanie respiró hondo repetidamente y su respiración se aceleró aún más cuando el médico dijo que estaba lista para la operación.

Pronto, los preparativos se completaron y Melanie fue empujada al quirófano. Todo su cuerpo temblaba, ya que estaba rodeada de miedo y no había forma de que se calmara. ¿Habría una mujer que no se asustara si estuviera en su situación?

Melanie miró inconscientemente a Alejandro, quien la seguía lentamente. Parecía mucho más tranquilo que ella en ese momento. Ella casi se echa a llorar, lamentando no haber informado a su familia de antemano. Si lo hubiera hecho, probablemente tendría más personas para consolarla y hacerla sentir mejor, a pesar de tener que escuchar primero el sermón de su familia.