La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 1808

Resumo de Capítulo 1808 : La Pequeña Novia del Sr. Mu

Resumo do capítulo Capítulo 1808 de La Pequeña Novia del Sr. Mu

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Ese único lanzamiento por encima del hombro parecía haber sacado de su cabeza la bravuconería del padre. Se acostó en el suelo, aturdido durante unos segundos, antes de ponerse de pie. “¡Tú... me engañaste! ¡Te escabulliste sobre mí!".

Jackson se apartó un mechón suelto de su flequillo de la frente, indiferente. “Meh, simplemente fuiste lento. Puedes intentar señalarme de nuevo si no me crees. ¿Personalmente? Sostengo que es mejor hablar de esto, pero bueno, si quieres una pelea, ¿quién soy yo para negartelo? Honestamente, yo, Jackson West nunca he perdido contra nadie en una pelea".

¿Jackson... West? Una extraña y brumosa sensación de familiaridad apareció en la mente del padre. Él se apoderó de la vaguedad y trató de conjurar más detalles, pero, lamentablemente, el hombre resultaba tener un cráneo varias veces más grande para su cerebro. “¡Pshh, puedes ser Jackie East o North o lo que sea! Puedo señalarte como quiera, hombre; ¡¿qué vas a hacer al respecto?! No es que esté lo suficientemente desesperado como para dejarme seducir por tu dinero, y definitivamente no voy a permitir que esta imperdonable humillación contra mi hijo quede impune. ¡Voy a sacarte los mald*tos dientes, chico bonito!".

Jackson curvó los dedos en dirección al hombre como si le hiciera señas para que se acercara. “Después de ti, chico duro. ¿Será esto un mano a mano o una pelea? Me funciona de cualquier manera, ¡quien termine llorando llamando al 911 es un debilucho!".

El padre, incitado, estaba a punto de estallar un ataque cuando uno de los familiares palideció de repente.

Sacó al hombre de la pelea y le advirtió en voz baja: "Escucha, no crees que... este podría ser el director ejecutivo de Industrias West, ¿cierto? Él se ve terriblemente similar a ese tipo... Escuché que el director ejecutivo también tiene habilidades de pelea genuinas, y a juzgar por la forma en que te derribó hace un momento, realmente estoy comenzando a preguntarme si accidentalmente hemos enojado al tipo de persona equivocada, hombre. ¿Cuál era el apellido de ese mocoso que volvió a ensangrentar la nariz de Chubby Chuck? No puede ser... Tremont, ¿verdad? ¡Amigo, no voy a enojar a ningún Tremont!”.

El rostro del padre se convirtió en un tono ceniciento parecido a la muerte. "D-De ninguna manera sería una coincidencia, ¿verdad?".

El pánico estaba prácticamente tallado en el rostro del familiar a estas alturas. “¡Hombre, será mejor que compruebes si nos hemos metido en un campo minado! ¡No vayas a cavar nuestras tumbas porque eres demasiado tonto para darte cuenta de m*erda!".

El padre, incrédulo, se volvió hacia Arianne. "¿Cuál es el apellido de tu hijo otra vez?".

"¿Por qué quieres saberlo, idiota?". Ella espetó.

Smore, sin embargo, hizo una mueca engreída. "Me llamo Tremont, Aristotle Tremont. Vamos, te reto; ¡Intenta tocarme! ¡Entonces le ordenaré a mi papá que te cocine para la cena!".

Arianne le dio una palmada al niño en el trasero con un movimiento intuitivo. "¡Vuelve a alardear y estarás castigado por un mes!".

“¡Esto es por empujar a Ari de regreso al hospital, id*ota! ¡Recuerda mis palabras, si el mismo Mark Tremont estuviera aquí, su venganza no sería tan simple como esta!", ella anunció en voz alta, antes de agacharse detrás de la espalda de Jackson por temor a las represalias del hombre.

Ella lo juró por Dios: ¡saber que tienes la espalda de un luchador todopoderoso para esconderse es lo más poderoso del mundo!

La comisura de los labios de Jackson se movió involuntariamente. ¡Era tan propio de su esposa recordar cada transgresión que alguien cometía solo para que ella pudiera hacer que probaran la retribución más tarde!

Cuando la madre vio la nueva pretensión de su marido de ser un obsequioso sí a todo a pesar de que lo humillaban, ella estalló de ira. “¿Están ustedes jodidamente locos? Mi hijo es el que es la víctima, ¡¿sin embargo, nos estás pidiendo que te disculpemos y te paguemos?! Y tocaste a mi marido con esa mano sucia...".

Su marido interrumpió su frase con una mano dura sobre mejilla. “¡¿Que d*ablos sabes tú, mujer?! ¡¿Quieres verme muerto tan pronto?!".

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