La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 205

Poco después, Mark entró en la habitación. "¿Qué pasó?".

Arianne lo miró con los ojos enrojecidos. “¿Estás con Aery Kinsey porque te gusta o porque quieres vengarte de mí? ¿Hmm? Admito la derrota, ¿está bien? ¿Qué tanto me odias para llegar a este punto? Casarte conmigo y entonces juntarte con mi media hermana. No solo toleraste que ella matara a nuestro hijo, sino que también la encubriste y ayudaste a los Kinseys después del incidente. Si realmente te gusta, ¿por qué no me dejas ir? Si es solo por venganza, me rindo. No soy una oponente digna. Usaré toda mi vida para pagarte lo que te debo. ¡No me disgustes más con esa gente!”. Ella respiró hondo antes de continuar con su diatriba: "No importa lo abominable que sea en tus ojos, ¡ya me he convertido en una persona tan patética! Incluso yo me desprecio. Mi mamá... Mi madre biológica conspiró contigo y encubrió a Aery Kinsey. Mi mamá me dijo que tenía cáncer y me obligó a suplicarte a que ayudases a los Kinseys. Realmente le creí. Soy una burla. Si Tiffany no se hubiera encontrado con ella en el hospital hoy, yo todavía no me habría dado cuenta. He tenido suficiente. Ya es suficiente. ¡Suficiente!". Hacia el final, ella ya no podía hablar por lo mucho que sollozaba.

Mark frunció el ceño mientras le entregaba un pañuelo, pero ella apartó la cara. Al ver esto, ella se secó las lágrimas con fuerza y ​​dijo: "No volveré a contactar a Aery Kinsey".

Arianne estaba confundida. ¿Estaba él adoptando una postura ahora? ¿Era realmente... sólo para vengarse de ella? ¿Qué tanto debía odiarla para llevar las cosas tan lejos solo por venganza?

Arianne sintió que la luz de su corazón se apagaba. "Bueno. Con tal de que cortes los lazos con ella, no dejaré a los Tremont en esta vida". Ella se quedaría en casa de los Tremont para vengarse de él y para atormentarlo.

Un indicio de una sonrisa brilló en las profundidades de los ojos de Mark. “Recuerda lo que dijiste hoy. No dejarás a los Tremont en esta vida. Lo que dijimos anteriormente queda anulado. Incluso si das a luz, sigues siendo una Tremont. Tienes que quedarte a mi lado para siempre".

Arianne se enderezó y lo miró. "Haré lo que dije. Espero que también puedas hacer lo que dices".