La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 369

La pérdida de ciertos materiales de joyería fue lo que llevó a la quiebra de la familia Lane. Jackson no podía imaginar cómo reaccionaría Tiffany si descubría que Ethan era la principal causa de la quiebra de su familia. De hecho, Ethan disfrutaba de su fama hoy porque solía depender de la familia Lane para comprar edificios sin terminar y estableciendo algunas empresas con el dinero que obtenía de la venta de las materias primas de la joyería. Aunque Mark tuvo una pérdida monetaria, la familia Lane quedó completamente arruinada.

De repente, Tiffany irrumpió a toda prisa por la puerta de la oficina. “Nuestras madres están tomando el té de la tarde juntas. ¡Tu mamá me acaba de enviar un mensaje de texto diciéndome que ahora van de compras!”.

Jackson cerró su cuaderno sin expresión y dijo con calma: “¿Por qué estás entrando en pánico? Déjalas en paz”.

Frustrada, Tiffany explicó: “Solo estamos actuando y no tengo ninguna intención de contárselo a mi mamá. ¿Cómo no estar preocupada? ¿Qué haremos si descubren la verdad? Quiero que sepas que mi madre no toleraría que nos separáramos una vez que descubra que estamos en una relación. Para ser sincera, está profundamente apegada a la vida lujosa que solíamos vivir. Por lo tanto, no puede esperar a que me case con un hombre rico. Ni siquiera importa si el hombre está divorciado mientras tenga dinero. En otras palabras, es una cazafortunas. ¿Entiendes ahora? Este es un trato entre nosotros. ¡No quiero perder mi orgullo y dignidad por esto!”. Cuando llegó al final de su oración, se pudo ver que había caído en la desesperación y el desamparo.

Al ver esto, Jackson se dio cuenta de que había descuidado sus sentimientos. Dijo: “No es tan grave como crees. Soy el único hijo de la familia, y a mi mamá no le importa cuánto gasto yo en ti y tu familia. ¿Cómo o por qué perderías tu dignidad? Creo que es una buena idea. Ambos tenemos paz al satisfacer a nuestras madres. Está bien, no te preocupes. Déjamelo a mí y ponte a trabajar”.

Tiffany sintió que no la estaba tomando en serio. “Hablas como si realmente estuviéramos en una relación. ¿No estamos fingiendo ser una pareja? Incluso si realmente somos una pareja, todavía no me siento cómoda con que gastes dinero en mí. Estoy fuera. Ya no quiero jugar más este juego. Voy a decirle a tu mamá que hemos roto. ¡No voy a continuar con este acto más!”.

Arianne permaneció en silencio hasta que Tiffany terminó de despotricar. “Tienes razón, Tiffie. Es mejor no involucrar a los miembros de la familia. Jackson tomó la iniciativa de involucrar a su familia, pero no debes involucrar a tu madre. De lo contrario, las cosas se pondrán difíciles para ti. Sin embargo, estaría bien si son realmente una pareja. Desafortunadamente, no lo son”.

Tiffany no pudo contener más su frustración y aplastó el conejito de peluche de Arianne como si fuera Jackson: “Ese idiota no se toma esto en serio, y no le importan mis sentimientos en lo absoluto. Soy un ser humano y tengo mis propios pensamientos. ¿Cómo no puede preguntar si estoy feliz o no? Deberíamos dejar las cosas claras si es solo un trato comercial, ¿verdad? Cuanto más claro esté, mejor. La excusa que usó para convencerme de que fingiera ser su novia es que no quería casarse. En ese caso, ¿cómo podemos tener una relación genuina? Francamente, no tengo planes de entablar una relación, especialmente con mi situación financiera ahora”.

Arianne se alegraba de que Bola de Arroz no estuviera en la habitación con ellos, de lo contrario, Tiffany podría desahogar su frustración con él. “Suficiente, Tiffie. Alégrate. Déjalo ir. Ya le has dicho a Jackson que quiere terminar el trato de todos modos. ¿Qué tal esto? Déjame invitarte a comer. ¿Qué tal si vamos al Café de Bahía Agua Blanca? Un buen festín te ayudará a olvidarte de tus problemas. Oh, cierto, Jackson no estará allí porque no es fin de semana”.