Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1073

Patricia cambió de semblante de inmediato.

¿Se había anunciado el compromiso durante el día y por la noche Valentina ya estaba en Villa Estrella de Mar?

¿Eran estos dos tan románticos?

¿Acaso Valentina era demasiado liberal? ¿Demasiado poco recatada? ¿Había venido aquí justo después de comprometerse para tocar el violín para Alejandro?

En ese momento, Patricia se sintió muy confundida.

Su estado de ánimo era complejo.

Muy celosa.

No era de extrañar que Alejandro no respondiera a sus llamadas. Estaba con Valentina, disfrutando de su tiempo juntos en la villa.

Había buscado mucha información sobre Valentina en línea, incluyendo rumores diversos, y había pedido a su primo que investigara, pero Valentina parecía haber surgido de la nada.

Su vida amorosa era tan limpia como una hoja en blanco.

Ni un solo escándalo.

—Alejandro ha estado escondiendo a esta persona hasta hoy para anunciarlo. ¿Realmente le importa tanto Valentina? Entonces, ¿qué pasa con todo el cuidado que tenía con Ana? ¿Fue todo una farsa?

Patricia parecía atrapada en un bucle, intentando entender, pero no podía.

Lo que quedaba era un profundo celo.

Mordió su labio rojo con fuerza.

Finalmente, tomó su teléfono y llamó al asistente Eduardo.

—Asistente Eduardo, ¿cuándo se conocieron el presidente Alejandro y Valentina? —preguntó.

Su tono sonaba altivo, exhibiendo la actitud orgullosa que caracterizaba a Patricia.

El asistente Eduardo respondió con calma: —Eso es un asunto privado del presidente Alejandro. No es apropiado que lo revele.

Patricia frunció el ceño: —Tienes razón, es su asunto privado, pero sabes cuál es mi relación con el presidente Alejandro. ¿Ni siquiera a mí puedes decírmelo?

—Lo siento. Si la señorita Patricia desea saber algo, debería preguntárselo directamente al presidente Alejandro. No tengo nada que decir. Estoy trabajando hasta tarde y tengo más cosas que atender. Adiós —El asistente Eduardo cortó la llamada con frialdad.

Patricia, escuchando el tono de desconexión en su oído, se enfureció completamente.

Valentina salió de Villa Estrella de Mar con su violín en la mano.

Antes de irse, había agregado a Ana en Instagram con éxito.

Pero justo cuando guardaba su violín y se disponía a arrancar el coche, recibió un mensaje de Alejandro en Instagram.

Era una fría colección de palabras:

[Elimina a Ana.]

Valentina soltó una risita: —Quién lo diría, el famoso y temible presidente Alejandro resulta ser una persona celosa.

Respondió casualmente: [No quiero eliminarla. Me dijo que le gusta ver algunas de mis publicaciones musicales en las redes sociales. Presidente Alejandro, no es necesario. Ten confianza en ti mismo. Después de todo, soy tu prometida.]

Tras enviar el mensaje, arrojó su móvil al asiento del copiloto, pisó el acelerador y se marchó rápidamente.

Al día siguiente

Ana se mudó de Villa Estrella de Mar.

Dado que oficialmente se había divorciado de Alejandro a ojos del mundo, naturalmente ya no podía quedarse en Villa Estrella de Mar.