Resumo de Capítulo 1519 – Capítulo essencial de Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate por Internet
O capítulo Capítulo 1519 é um dos momentos mais intensos da obra Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Segunda oportunidad, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
—Yo sé que esto será difícil, pero... no podemos esperar mucho tiempo. Si ellos quieren dinero, que pidan lo que sea, nosotros se lo daremos.
Escuchando estas duras palabras, Julio también sentía pena e impotencia: —Ellos no carecían de dinero, por lo tanto, no importaba cuánto ofrecieran, definitivamente no lo aceptarían.
La mujer guardó silencio unos segundos antes de responder: —¿Y si acepto que vayas a buscar a Elena? Habla con ella, si ella le pide directamente el favor a tus hijos, seguro no se negarán.
Julio hizo mala cara: —¿Siempre has dicho que no me encuentre con ella?
—Ahora es diferente, no quería que la vieras, pero no tenemos otra opción, ¿verdad? Prefiero enfrentar el dolor yo misma.
—Ay, lo pensaré.
—No hay nada que pensar, ya está decidido. Ve a hablar con Elena mañana. Elena, siendo una mujer del campo, no sabe mucho de esto, pero habla bien con ella, seguro que aceptará.
—Está bien, no te preocupes tanto, yo me encargaré de todo esto.
...
Javier llegó al hotel y se registró.
Al ser tan tarde, se fue directo a bañarse y a dormir.
A la mañana siguiente, muy temprano, organizó las grabaciones en su celular y las envió al grupo de chat de los cuatro.
La noche anterior había sido bastante precavido y había encendido la grabadora mientras esa persona hablaba.
A veces, cuando es necesario dejar pruebas, hay que dejarlas y listo.
Ana observa con detenimiento la conversación de los tres en el chat.
Tras un breve silencio, dijo: [Estoy de acuerdo con la idea de Francisco, hablemos con mamá esta noche y preparémonos con anticipación. Creo que después de ser rechazado varias veces por ustedes, seguro buscará otra forma de proceder. Tal vez intentará de cualquier forma persuadir a mamá para que ella los convenza.]
Al decir esto, hubo un silencio.
Elena era una persona bondadosa y si Julio sabía cómo manipular los sentimientos, podría convencerla.
¿Y si no se trata simplemente de donar médula ósea?
Javier, impetuoso, exclamó: [¡Mamá no caerá en su vil trampa! Pero ¡qué sinvergüenza es! Preferiría que hubiera muerto hace veinte años.]
…
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