Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 190

Fuera del edificio de la televisora.

El coche de Nuria acababa de salir del estacionamiento cuando, de repente, alguien apareció bloqueando su camino.

Ella pisó el freno de emergencia, y su expresión cambió drásticamente.

¡De dónde había salido esa persona!

Había estado distraída y nerviosa durante los últimos días, cometiendo errores frecuentes en el trabajo, y ahora casi había atropellado a alguien.

Si hubiera herido a alguien en la entrada de la televisora, su carrera estaría acabada.

Con un sudor frío en la espalda, Nuria respiró hondo, tratando de calmar su irritación, y bajó del coche con una expresión preocupada.

—¿Estás bien? ¿Quieres que te lleve al hospital? Lo siento, pudo haber sido un punto ciego; no vi a nadie.

Carmen no esperaba que Nuria casi la atropellara y también se asustó mucho.

—Solo parece que me torcí el tobillo, no es nada grave.

—¿Carmen? —El rostro de Nuria se endureció, su expresión se volvió más fría al reconocer a la persona frente a ella.

Carmen apenas estaba sonriendo cuando notó el cambio rápido en la expresión de Nuria. ¿Qué más necesitaba entender?

Anteriormente, Nuria la había usado para averiguar cosas sobre Ana, y después de obtener lo que quería, ni siquiera la agregó como amiga en WhatsApp; ahora, su trato era aún más despectivo.

¿Acaso la consideraba una tonta?

—Así que la Señorita Nuria aún me recuerda, pensé que después de nuestra última conversación, me habría olvidado. ¿Está satisfecha con la información sobre Ana que obtuvo de mí? La Señorita Nuria parece muy curiosa sobre Ana, ¿acaso conoce al hombre que la mantiene?

Carmen no ocultó sus intenciones y preguntó directamente.

—Dime, ¿qué quieres?

Nuria respondió con frialdad, su postura arrogante, sin importarle ser confrontada.

Nuria, perdiendo la paciencia con la persistente Carmen, dijo: —Parece que la familia González ha estado enfrentando muchos problemas últimamente. Si no quieres que las consecuencias sean aún peores, mejor no vengas a mí buscando información.

Dicho esto, Nuria abrió la puerta del coche y se subió.

Carmen, frustrada, golpeó la ventana del coche y dijo a Nuria: —En la ciudad A, no hay muchas personas que puedan hacerte callar y tener cuidado con lo que dices, ¿verdad? Tú me preguntaste sobre Ana porque te gusta el hombre que la mantiene, ¿no es así? A ti te gusta...

Carmen pareció darse cuenta de algo de repente.

Se detuvo bruscamente.

Su expresión se tornó muy grave.

Sus ojos se abrieron de par en par.

Nuria se puso las gafas de sol, ocultando la burla en sus ojos. Sabía que Carmen probablemente había adivinado algo. Si Carmen podía causar problemas y desviar la atención de Alejandro hacia la familia González, ¡eso sería incluso mejor!