Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 480

Don Fernando no tiene una buena impresión de Leticia.

Es evidente que Leticia ha utilizado la porcelana antes para conseguir sus objetivos, por eso ahora insiste y ofrece un precio elevado, esperando poder emplearla de nuevo.

¿Cómo podría él colaborar en algo indebido?

—No,— responde Don Fernando con frialdad.

Acto seguido, su asistente le indica a Leticia, —Señorita Leticia, por favor.

Leticia, al percibir claramente la intención de Don Fernando de despedirla, se irrita profundamente. Don Fernando es temperamental y lo mismo sucede con su equipo, ¡hasta rechazan el dinero que les ofrecen!

Finalmente, solo le queda retirarse decepcionada.

Justo después de que Leticia se marcha, Don Fernando hace una llamada.

—Podemos empezar a investigar a Leticia.

Después de irse, Leticia conduce de vuelta a su casa en la Ciudad A.

En el coche lleva varios informes médicos que ha recogido del hospital.

Está nerviosa.

Ya sospechaba que Bryan le pediría que abortara, pero no esperaba que él estuviera tan decidido.

Desde que la porcelana se rompió, ha sentido que Bryan se vuelve más distante.

¡Debe hacer todo lo posible para mantener a su hijo y a Bryan!

Al llegar a casa, saca su móvil y busca a Beatriz en WhatsApp. Justo cuando está a punto de enviar otra foto, ve que ya no es amiga de Beatriz y su mensaje es rechazado.

El último mensaje de Beatriz indicaba que lo borraría en diez minutos.

Pensó que Beatriz solo estaba fisgoneando y que decir que lo borraría era solo una amenaza, que nunca realmente la eliminaría.

Leticia, con los ojos llorosos, le entrega un montón de informes médicos, —Presidente Campos, quizás sea el destino, el destino quiere que este niño se quede, después de todo es una pequeña vida, y también es tu hijo y el mío, nunca pensé que este niño llegaría, todo lo que te prometí antes cuenta, no te molestaré, ni dejaré que el niño perturbe tu vida, por favor, déjame tenerlo. Te prometo que nadie sabrá que mi hijo es tu hijo ilegítimo, ¿está bien?

Cada palabra de la mujer es humilde.

Pero el rostro de Bryan solo se vuelve más frío y sombrío.

Revisa uno por uno los informes médicos.

Incluso examina las órdenes médicas.

—He organizado que alguien te lleve mañana para hacer nuevos exámenes, para asegurarnos de que el aborto no dañe tu cuerpo,— dice Bryan directamente.

Dado el caso de Leticia, un hospital ginecológico normal no garantizaría que la cirugía fuera sin complicaciones, pero confía en su médico para realizarla.

El rostro de Leticia cambia, —¿Realmente tiene que ser así? ¡Es una pequeña vida!

Pone sus manos sobre su vientre, con un sudor frío recorriendo su espina dorsal.