No Era Monjita, Era una Fiera romance Capítulo 6

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—En ese momento había demasiada gente, se me pasó por completo.

—¡Ay, tú! Sigues igual que en la época de la escuela, aparentando ser tan seria e inteligente, pero en el fondo eres la persona más distraída de todas.

Ambos se reían entre sí, como si nadie más estuviera en la habitación. Pero a Eloísa, las palabras con las que Martín la presentó le dolieron como si le hubieran clavado una espina en el pecho.

Jamás pensó que, después de tres años, al final solo sería para él “una buena amiga”.

Vaya manera de burlarse de ella.

Eloísa bajó la mirada.

Le quedaban menos de treinta días para irse de la vida de Martín, y se obligó a respirar hondo una vez más.

—Ya es tarde, Martín. Cuando ella termine de cenar, llévala tú de regreso, ¿sí? Necesito hablar contigo a solas.

Llevaban tres años juntos. Más allá de todo, Eloísa quería irse con dignidad, sin hacer un escándalo.

Pero lo que no esperaba era que, apenas dijo esto, los dos de enfrente se quedaron tiesos, como si un rayo los hubiera alcanzado.

—¿Y ahora qué pasa?

Martín dudó un momento, luego se animó a explicarle a Eloísa:

—Es que… Eloísa, pasó algo en el trabajo de Jazmín. Tuvo un problema y necesita quedarse aquí unos días.

—No.

Esta vez, Eloísa no lo pensó ni un segundo antes de negarse.

No podía soportar que, en ese rincón que ella y Martín habían construido juntos, repleto de recuerdos, ahora se colara la presencia de otra mujer.

—Ella no puede quedarse aquí.

—Por aquí cerca hay muchos hoteles. Si no le conviene alguno, que se quede en uno bueno. Yo puedo hacer la reservación y decidir cuántos días necesita.

Mientras decía esto, Eloísa sacó el celular, lista para buscarle a Jazmín una habitación decente en los alrededores.

Eso era lo más que podía ceder.