Pero… ¿¡Eres un Millonario!? romance Capítulo 296

El salón estaba lleno de gente, el ambiente era festivo.

Ricardo llegó al lugar, siguiéndole Nacho con un pesado cofre de madera en las manos.

Rodrigo lo vio y se acercó rápidamente: "Ricky."

Rodrigo lucía excepcionalmente bien ese día, su traje blanco lo hacía ver guapo y elegante, con un toque de nobleza.

"Felicidades por tu compromiso."

Ricardo levantó la mano, y Nacho le pasó el cofre: "Un regalo de compromiso preparado por Sr. Roldán para ti."

Rodrigo no esperaba que Ricardo le hubiera preparado un regalo, lo tomó y lo abrió con cuidado.

Dentro había una joya exquisitamente tallada y un documento.

"Ricky, esto es..."

Rodrigo tenía una idea de lo que podría ser y, por instinto, quería rechazarlo.

"Eres mi amigo, esto es lo que te mereces."

Ricardo había preparado esto mucho antes, independientemente de quién se casara Rodrigo, este documento era para él.

Un 5% de las acciones de Acumen Capital, incluso si Rodrigo no trabajaba ahora, los dividendos anuales serían suficientes para una vida sin preocupaciones.

Valeria sintió envidia al ver el documento.

¡Si Natalia no se hubiera casado con Ricardo antes de que ella lo hiciera, si no fuera por la interferencia de Natalia, todo Acumen Capital sería suyo!

Rodrigo se sintió conmovido y compartió algunas copas con Ricardo.

Luego, continuó atendiendo a los invitados con Valeria. Cuando se fue, Ricardo tembló de repente.

"Sr. Roldán..."

Nacho reaccionó rápidamente y sostuvo a Ricardo: "¿Estás bien?"

Ricardo negó con la cabeza: "Estoy bien."

Había estado muy ocupado últimamente, tanto que no tenía tiempo para comer, su gastritis había reaparecido y, después de unas copas, se sentía mal.

"Te llevaré arriba para que descanses."

Ricardo no quería interrumpir la fiesta de Rodrigo, así que asintió: "Está bien."

...

Natalia se despertó en una suite, sintiéndose débil.

El cuarto estaba vacío, pero Natalia pudo percibir el peligro.

Se bajó de la cama con cuidado, pero antes de que pudiera dar unos pocos pasos, escuchó voces fuera de la puerta.

"Todo está listo, vamos a entrar luego, después de que nos divirtamos, los periodistas publicarán la noticia y Natalia estará acabada."

"Escuché que los invitados de hoy son figuras importantes de la sociedad, ¿podrá Natalia seguir mezclándose en la sociedad?"

"Jajaja, tienes razón."

¡Alguien estaba allí!

La persona en el baño escuchó el ruido, salió con una toalla enrollada y abrió la puerta, se encontraron cara a cara.

El corazón de Natalia, que había estado en suspenso, finalmente se calmó.

"Sr. Roldán, ¿eres tú?"

El hombre que estaba frente a ella estaba desnudo de la cintura para arriba, una toalla cubría sus geniales, dejando a la vista su pecho musculoso, una oleada de masculinidad golpeaba su rostro.

Natalia, por instinto, volvió la cabeza, sus mejillas se pusieron coloradas.

¡Si hubiera sabido que era el Sr. Roldán, no habría abierto esa puerta!

Ricardo la miraba con los ojos entrecerrados, claramente Natalia estaba un poco nerviosa: "¿Qué te pasa?"

"Sr. Roldán, no hables, alguien me está buscando."

Apenas terminó de hablar, se escucharon golpes en la puerta desde el exterior.

El rostro de Natalia cambió de inmediato, el hombre la empujó al baño y luego abrió la puerta.

"¿Has visto a.…? Sr. Roldán, ¿cómo es que estás aquí?"

El hombre que lideraba parecía un tanto desconcertado, ¿Cómo es que el Sr. Roldán estaba en la habitación de huéspedes? ¿Y vestido así?

¿Habrían interrumpido algo importante del Sr. Roldán?